Intervienen 15 trampas 'ballesta' a un vecino de Burgos investigado por el mal estado de sus perros

La Guardia Civil ha levantado varias actas denuncia al propietario de unos canes –por infracciones a la Ley de Animales de Compañía y a la Ley de Patrimonio Natural y de la Biodiversidad-, por las irregularidades encontradas tras la inspección llevada a cabo a su propiedad, por el supuesto mal estado de bienestar y sanidad animal de estos.

Los hechos ocurrieron días atrás cuando el Seprona tuvo conocimiento a través de la colaboración ciudadana, del supuesto mal estado en el que se encontraban varios perros, en una localidad ubicada en el Valle de Valdelucio.

En respuesta a la información recibida de la colaboración ciudadana, una Patrulla del Seprona de la Comandancia de la Guardia Civil de Burgos se personaba en las instalaciones de un particular donde, en una especie de almacén, se localizaron varios perros.

Siete de los ejemplares verificados carecían del preceptivo microchip identificativo así como de las vacunas obligatorias. A simple vista, dos canes presentaban varias heridas abiertas que, en apariencia, estaban siendo tratadas por el propio dueño. De las irregularidades observadas se ha levantado acta denuncia remitida a la Autoridad competente.

Durante la inspección, en el interior de la estancia donde se encontraban se observaron varias trampas del tipo 'ballesta', utilizadas para atrapar animales y aves de pequeño tamaño, que si bien presentaban indicios evidentes de antigüedad y desuso, por el óxido acumulado, su simple tenencia está prohibida, como lo es también su utilización y comercialización, al tratarse de un procedimiento masivo no selectivo para la captura o muerte de animales.

Las 15 trampas encontradas han sido intervenidas, al tratarse de artes prohibidas, y se ha levantado acta denuncia de los hechos.

Recordar que la comercialización, el uso y la simple tenencia de este sistema de captura está prohibida no sólo en la Comunidad, sino también en todo el territorio español, conforme a la reciente Ley 4/2021 de Caza y de Gestión Sostenible de los Recursos Cinegéticos de Castilla y León y a la Ley 42/2007 de Patrimonio Natural y de la Biodiversidad, respectivamente.

Sin perjuicio de que de su acción o manipulación, pudiera comprobarse alguna responsabilidad penal, en cuyo caso podría enfrentarse a un posible delito contra la flora y la fauna tipificado en nuestro Código Penal.