La Policía Local de Burgos detuvo el pasado 28 de septiembre a una expareja que se agredió mutuamente.
Según informan fuentes policiales, los hechos ocurrieron durante la madrugada, cuando la Policía recibió un aviso en el que se informaba de que en un domicilio de la calle Alfonso VIII se estaba produciendo una agresión entre un hombre y una mujer.
Fue entonces cuando agentes adscritos a la Unidad de Protección Ciudadana (UPC) se personaron de inmediato en el lugar, encontrándose nada más llegar a una mujer muy alterada y totalmente empapada de agua.
Tras preguntarla, la mujer en cuestión manifestó que había mantenido una fuerte discusión con su expareja, con la que aún convive, y que, a consecuencia de esta, el hombre le había tirado un cubo de agua por encima, al tiempo que le amenazaba para evitar que llamase a la Policía.
Por su parte, el hombre, que también se encontraba en la vivienda, corroboró los hechos narrados por la mujer, añadiendo que, tras tirarle el cubo de agua, ella le agredió, provocándole unas lesiones en el torso que fueron vistas por los propios agentes.
Por todo ello, la Policía Local de Burgos terminó deteniendo al hombre de 44 años, por un presunto delito de violencia de género, y a la mujer de 30 años como presunta autora de un delito de malos tratos en el ámbito familiar.