Burgos se ha vuelto a unir este miércoles en la Plaza de la Flora para mostrar su dolor tras el terrible suceso ocurrido el pasado fin de semana que acabó con la vida de Sergio Delgado. Una concentración que ha sido convocada por la Asociación Civil Burgalesa (Socibur) y que ha contado con la presencia de dirigentes políticos autonómicos, así como locales y provinciales. Entre los que han destacado la alcaldesa de la ciudad, Cristina Ayala, el vicealcalde de la ciudad, Fernando Martínez-Acitores, varios concejales del Consistorio y el vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo.

Un minuto de silencio con el que han condenado la tragedia del pasado sábado, 24 de febrero, cuando este joven de 32 años fallecía a consecuencia de un puñetazo por el simple hecho de "ser de Valladolid". Ante este suceso, medio centenar de personas se han concentrado frente al lugar donde ocurrieron los hechos para mostrar su apoyo a la familia y amigos y leer un manifiesto.

El presidente de Socibur, Julio Moreno, ha sido el encargado de leerestas palabras donde ha expresado su condena a lo ocurrido y ha manifestado la solidaridad de la ciudad burgalesa con la familia y amigos de Sergio. "No hay explicación, la barbarie no tiene cabida alguna entre nosotros", ha lamentado.

En sus palabras, ha recordado que esta ciudad castellana y leonesa es "de acogida, de hermanamiento, de cruce de caminos, de vida, dignidad y abierta al mundo" y denunció que este suceso "mancille" la historia de la ciudad. Del mismo modo, ha garantizado que no permitirán que "el desánimo, horror y la violencia tengan cabida en esta gran ciudad". Y, por todo ello, quieren volver a recuperar "la nobleza, el valor de la vida, los valores de convivencia y unión que Sergio tanto querría".

Una intervención que ha aprovechado para trasladar su "cálido abrazo" a la familia del joven y ha finalizado colocando un ramo de flores frente al lugar donde ocurrió el terrible suceso.

"Valladolid no es el enemigo de Burgos"

"Valladolid no es el enemigo de Burgos, ni Burgos es el enemigo de Valladolid", manifestó el vicepresidente de la Junta en este minuto de silencio. Quien, además, pidió "restaurar los lazos interprovinciales" entre las distintas provincias para que haya un "mayor sentimiento de Comunidad".

Del mismo modo, trasladó el pésame a los familiares y lamentó el suceso ocurrido: "Estaba en el mejor momento de su vida, yéndose a la provincia de al lado, una provincia vecina y hermana". Por otro lado, Gallardo quiso expresar su "condena más rotunda" a la "violencia de la extrema izquierda".

Aseguró que este suceso es algo "que se veía venir" y que "todo el mundo lo sabe" porque "llevan años jugando a la ruleta rusa, con agresiones indiscriminadas, esparciendo odio y violencia" y que, lamentablemente, "lo ha tenido que pagar Sergio".

El vicepresidente de la Junta habló desde su postura de "burgalés e hijo y nieto de burgaleses" y afirmó que esa "gentuza" no representa a los vecinos de la ciudad. "Han manchado su nombre de manera inevitable por este acto repugnante que ha acabado con el asesinado de Sergio", lamentó.

Aprovechó su participación en el acto para hablar del "odio irracional" frente a Valladolid y viceversa y aseguró que es una "irresponsabilidad muy grave que durante décadas se haya alimentado este discurso". También tildo de "inaceptable" que alguien sufra una agresión por "el hecho de ser de Valladolid": "Esto merece una reacción de la sociedad".

"Los gobiernos, los representantes públicos, los diputados provinciales, los diputados autonómicos, los responsables locales, tienen que hacer una reflexión de cómo se puede reconducir una situación tan grave como esta en la que un presunto asesino acaba matando a una persona inocente por el hecho de ser de un lugar determinado", añadió. También recordó que aún queda "mucho que reflexionar" y que "habrá que fomentar y restaurar los lazos interprovinciales entre las distintas provincias de Castilla y León".