Los veterinarios reivindican el reconocimiento pleno de su condición sanitaria
Los veterinarios de Castilla y León reivindican el reconocimiento pleno del carácter sanitario de la profesión veterinaria y reclaman además el IVA sanitario en los servicios veterinarios.
Son dos de las reclamaciones que el colectivo pone sobre la mesa en la celebración está semana de la Festividad de San Francisco de Asís, patrón de los veterinarios y de los animales, que tuvo lugar el pasado 4 de octubre pero que muchos Colegios de la Comunidad han celebrado este fin de semana con actos conmemorativos y cenas de hermandad.
El presidente del Consejo de Colegios Veterinarios de Castilla y León y presidente del Colegio de León, Luciano Díez Díez, recordó anoche en los actos celebrados en León que tanto las leyes autonómicas como las estatales reconocen la condición sanitaria de la profesión veterinaria “pero no están desarrollados los derechos que conlleva”.
Esta situación afecta a profesionales de la Administración Pública (veterinarios, farmacéuticos, médicos y enfermeras) que trabajan en Salud Pública. Se trata de cerca de un millar de veterinarios oficiales que desempeñan su labor en la Junta de Castilla y León. 194 en León; 101 en Zamora; 198 en Salamanca; 145 en Valladolid; 105 en Avila; 180 en Burgos; 99 en Segovia; 70 en Soria; y 76 en Palencia.
“Pedimos, como sanitarios, el acceso de este colectivo a la carrera profesional. Reclamamos asimismo, como sanitarios, alcanzar el mismo sistema de acceso a la función pública que tienen en el Sacyl”, señaló el presidente autonómico, quien mostró el respaldo de la organización “a todas las reivindicaciones y medidas de presión que están llevando a cabo algunos compañeros en la Comunidad”.
Luciano Díez Reclamó además el IVA sanitario en los servicios veterinarios. A este respecto, pidió el reconocimiento sanitario de consultorios, clínicas y hospitales veterinarios, para que su labor asistencial no esté gravada con el IVA del 21%. “El incremento del IVA ha supuesto un grave perjuicio para las clínicas y para los animales de compañía, sobre todo teniendo en cuenta que en época de crisis se ha reducido el cuidado de las mascotas. El incumplimiento de tratamientos y de cuidados puede suponer un riesgo de salud pública”.