El comité de evaluación del concurso Futur-e lanzado por Endesa para la búsqueda de iniciativas industriales que aprovechen el emplazamiento de la central térmica de Compostilla II otorgó su respaldo unánime a cinco proyectos de los ocho que habían sido presentados. Por su parte, la compañía eléctrica también anunció su intención de implicarse directamente en otros dos planes empresariales propios para el reciclaje de baterías de vehículo eléctrico y de palas de aerogenerador. En el caso de que esas iniciativas salieran adelante, “Compostilla podría convertirse en un referente de movilidad sostenible, servicios sociosanitarios y economía circular a escala nacional”, destacaron fuentes de la compañía.
En ese sentido, las propuestas que el comité consideró compatibles con el territorio están vinculadas al sector de la movilidad o a la prestación de servicios sociosanitarios. También hay dos iniciativas para fabricar productos industriales y materiales de construcción a partir del aprovechamiento de subproductos de procesos industriales y de residuos. Por último, una iniciativa plantea crear una planta de producción de hidrógeno, con implicación de Endesa como socio industrial. El comité resaltó las características de “sostenibilidad e innovación” de unos proyectos que “atraerán actividad económica y generarán empleo en la zona”, aseguraron.
Respecto a los tres proyectos que no obtuvieron la calificación de idóneos, al considerarse que tendrían mejor cabida en otros espacios habilitados en la zona, el comité técnico se comprometió a continuar con su seguimiento para asegurar que se concreten y conseguir sumarlos al tejido económico de la comarca.
Las iniciativas aprobadas pasan ahora a una nueva fase para que sus promotores puedan hacerse con las instalaciones y el espacio que precisan en la superficie que ha venido ocupando la central en el municipio berciano de Cubillos del Sil. El resultado final podría concretarse como un proyecto integral o como la suma de varios de los proyectos presentados.
Cabe recordar que el comité de evaluación del plan Futur-e está integrado por la directora del Instituto para la Transición Justa (ITJ), Laura Martín; el director general de Energía de la Junta, Alfonso Arroyo; los alcaldes de Ponferrada y Cubillos del Sil, Olegario Ramón y Antonio Cuellas, respectivamente; los expertos nombrados por la Universidad de León (ULE) Nuria González y Victoriano Marcelo; y los directivos de la compañía Miguel Temboury y Juan Álvarez.
Este concurso internacional para promover la implantación en el Bierzo de empresas que mitiguen el fin de la actividad de generación térmica pretende paliar los efectos del cierre mediante el establecimiento de nuevos modelos empresariales. El concurso de ideas se acompaña de otras actuaciones, como el desarrollo de 780 megavatios (MW) renovables, la organización de cursos de capacitación profesional o la priorización de mano de obra local en las tareas de desmantelamiento de la central.
Recovery Fund
Por su parte, Endesa prepara, al amparo del Recovery Fund europeo, sendos proyectos de plantas de reciclaje de baterías de vehículo eléctrico y de palas de aerogenerador para el emplazamiento de la central clausurada el pasado 30 de junio. Estas iniciativas “precisan del apoyo de financiación pública y del establecimiento de consorcios que los realicen”, señalaron fuentes de la compañía.
Además, la eléctrica manifestó su disposición a incluir el proyecto de planta de producción de hidrógeno verde dentro del centenar que optarán a estos fondos en toda España. La implicación de Endesa en esta iniciativa se materializaría construyendo la planta fotovoltaica del complejo e invirtiendo en las instalaciones que producirán el hidrógeno verde, obtenido con suministro de electricidad renovable.