Los funcionarios de prisiones de León ya no pueden más: "Vivimos un auténtico caos"

La Sección Sindical de Acaip (Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias) en el Centro Penitenciario de Mansilla de las Mulas denunció hoy las "insoportables condiciones en la que están desarrollando su labor los trabajadores de la cárcel leonesa”, tras una serie de incidentes registrados en las últimas semanas.

La sección sindical de Acaip en el centro penitenciario exige de nuevo “más seguridad y disciplina ante estos hechos”, que en la mayoría de los casos, lamentan, “quedan en un mero expediente disciplinario sin consecuencias penales”.

Aseguran que la escasez de personal es “alarmante” y que solamente una cobertura total de la plantilla hará que el trabajo diario sea digno y no estén expuestos a “agresiones diarias como las que se están produciendo en la cárcel de Mansilla”.

También denuncian falta de personal en el área sanitaria y explican que, a día de hoy, tan solo son tres médicos desarrollan su labor en Villahierro. “Esta carencia, además de no asegurar la asistencia sanitaria adecuada a los internos, hace que los enfermeros del centro tengan ahora una mayor carga de trabajo y desarrollen el mismo sin la debida formación y sin la debida contraprestación económica”, argumentan y matizan que la falta de asistencia sanitaria “hace que la situación en el centro sea a día de hoy un auténtico caos”.

Falta de medios

Además, aluden a la escasez de psicólogos, educadores y demás personal, lo que hace que “no haya ni una clasificación interior digna ni existan medios adecuados para un tratamiento individualizado ni para los fines que la Ley Orgánica General Penitenciaria dispone”. También consideran relevante la “continua falta de inversión en el centro penitenciario” y reclaman la “rápida e inmediata actualización” de infraestructuras que lo precisan 23 años después de la apertura de la prisión.

“Los trabajadores de prisiones hacemos una labor esencial para la sociedad Apagamos fuegos y salvamos vidas, poniendo en riesgo diariamente las nuestras. Nuestros dirigentes están empeñados en que nuestra labor sea cada vez más difícil y que las condiciones de trabajo en un medio como una prisión sea hoy insoportable”, señalan en un comunicado.

El sindicato relata una serie de incidentes, hasta 13 registrados en 21 días de julio y agosto, entre los que destacan agresiones entre internos o a funcionarios, plantes de presos, intento de suicidio, peleas multitudinarias, daños a objetos y autolesiones.