La localidad leonesa Hospital de Órbigo regresó un año más al siglo XV para celebrar las Justas del Passo Honroso con las que se recuerda la batalla del caballero leonés Don Suero de Quiñones y sus nueve acompañantes en 1434 para honrar su amada, Leonor de Tovar, en una cita declarada de Interés Turístico Regional.
La celebración volvió a llenar las calles de Hospital de Órbigo de miles de turistas, así como de caballeros y damas medievales que participaron en las diferentes actividades propuestas, como el mercado, el campamento o las diferentes exhibiciones teatrales y musicales, que sirvieron para ambientar la recreación histórica del hito de Don Suero de Quiñones.
Las celebraciones llegaron a su punto álgido en la tarde de este domingo, cuando las inmediaciones del puente de Hospital de Órbigo acogieron el torneo entre caballeros medievales. Hasta el palenque llegó el cortejo encabezado por el rey Juan II de Castilla y la reina Isabel II de Portugal, junto a las damas y los caballeros. Allí, al igual que ocurrió en 1434, Don Suero de Quiñones revivió la hazaña de romper 300 lanzas contra todos los que quisieran cruzar el paso.
Don Suero, que llevaba al cuello una argolla y había hecho voto de ayuno los jueves en señal de amor por su dama, había pedido al rey Juan II en Medina del Campo (Valladolid) establecerse como mantenedor del paso del Órbigo y retar a todo aquel que quisiera cruzar para librarse de su esclavitud.
Finalmente, Don Suero se proclamó ganador, aunque sin alcanzar las 300 lanzas, y el caballero obtuvo el amor de Leonor de Trovar, en el que, desde entonces, se convirtió en el Passo Honroso.
La Fundación Sierra-Pambley recibe el título de Mantenedor de las Justas Medievales del Passo Honroso 2023
Horas antes del inicio de la esta celebración, la Fundación Sierra Pambley recibió en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Hospital de Órbigo el título de Mantenedor de las Justas Medievales del Passo Honroso 2023, cogiendo el testigo de las sanitarias que lucharon contra la pandemia del COVID-19 en Hospital y Puente de Órbigo.
Con la entrega del ‘bastón de mando’ para la celebración posterior, la Coordinadora de las Justas reconoció el trabajo “insustituible” llevada a cabo por la Fundación “impregnada de los principios de la Institución Libre de la Enseñanza en favor del desarrollo de la comarca rural más poblada de la provincia de León”.
En este sentido, el presidente de la institución, Graciliano Palomo, destacó que en el trabajo educativo con niños y adultos desde hace más de 130 años, “se encuentra una de las claves para amortiguar el impacto de la despoblación en la Ribera”. A lo largo del discurso, destacó cómo gracias al cometido educativo de la Fundación, a la visión de futuro de los maestros Tomás Álvarez y Felicísimo González del Campillo y a la respuesta de los agricultores de la Ribera, “se extendía la renovación de las prácticas agrícolas tradicionales o la introducción de cultivos como las alubias, las hortalizas pero sobre todo la remolacha, que derivaría años después en la construcción de la fábrica azucarera de Veguellina”.
“Aquel espíritu del fundador lo han sabido trasladar la Cooperativa Helios 82 a la etapa actual, a través del Colegio Sierra-Pambley, la Granja Escuela La Campaza y el Centro de Desarrollo Rural ‘El Villar’. Por ello, el Patronato de la Fundación Sierra-Pambley está plenamente satisfecho y comparte este honor de mantenedor con los miembros” de la cooperativa”, apuntó.