El desconocido pasado en un pueblo de León de Begoña Gómez, la mujer por la que un presidente puede dejarlo todo

Todas las miradas están puestas en él y en ella. El reloj de una posible dimisión arrancó de manera inaudita el pasado miércoles y tendrá su culmen este lunes. Tic, tac, tic, tac. Un país parado por una "reflexión" y expectante. Y todo parece girar, o eso ha asegurado Pedro Sánchez, en torno a ella. Begoña Gómez era hasta hace unos meses una mujer de perfil discreto, pero de repente se ha abierto la caja de Pandora tras conocerse las acusaciones por realizar presuntas cartas de recomendación a empresas que posteriormente recibían ayudas del Gobierno. Hasta el punto de que todo un presidente del Gobierno puede abandonar su puesto por ella, mañana se sabrá su decisión, aunque es cierto que otros nombres como Pegasus o Koldo también revolotean en el espectro.

De Begoña Gómez se ha escrito mucho, demasiado, pero poco se conoce del pasado leonés que la mujer del presidente tiene. Pedro Sánchez ya ha asegurado sin rubor, peor rozando lo hortera, que está “profundamente enamorado” de ella. Ahora vamos a conocer que enamoró a ella de este pequeño pueblo de León, en el límite entre Zamora y Valladolid.

Restaurante Rebeco, una de las últimas visitas realizadas por Begoña a Valderas

Aunque la mujer más señalada de momento nació en Bilbao, sus orígenes hay que buscarlos en tierras leoneses, ya que pasó varios veranos en León, concretamente en Valderas. Allí estuvo correteando por sus calles hasta los 16 años. Valderas es un pueblo con mucho ambiente, aunque es cierto que tuvo momentos mejores. Con poco más de 1.500 habitantes, sus veranos son muy intensos ya que cuenta con muchos turistas, pero sobre todo, con gente que vuelva a casa para disfrutar de unos días de descanso. Entre ellas siempre estuvo Begoña, que ahora con 48 años seguro que anhela aquellos días de anonimato.

Visitas anónimas

Pero si por algo es conocido Valderas es por su gastronomía. Por su bacalao y su vino. Hasta el punto de que el propio presidente en una entrevista realizada hace años ya presumía del bacalao de este pueblo. Aquí es tradición y devoción. Hasta el punto de que una de las últimas visitas que ambos realizaron al pueblo fue al restaurante Rebeco. Allí todavía recuerdan su visita y destacan lo discreta que Begoña siempre ha sido. En los últimos años han sido varias las ocasiones en las que ha visitado la localidad en visita privada. Y no, nunca en Falcon.

El padre de Begoña Gómez, Sabiniano, que también se encuentra en el centro de toda la polémica por sus negocios. Es de Gordoncillo, otro municipio de León. Y su madre, ya fallecida, es de Valderas. En el entierro se la pudo ver junto a sus dos hijas, aunque está enterrada en Valdefuentes, una pedanía próxima y donde parece que el tiempo sea parado. Todos ellos se dedicaban a la agricultura, por lo que los orígenes de la mujer de Sánchez son muy humildes. Apenas mantiene familia en el pueblo.

Los veranos de Begoña en Valderas eran como los que toda una generación EGB pudo tener. Con paseos en bicicleta (una afición que aún mantiene) a los pueblos de al lado, con días de piscina y de cine de verano y de lecturas veraniegas. Sin embargo, a los 16 años se cortó todo por lo que apenas los más viejos del lugar, y con buena memoria, recuerdan algo de esta “estilosa chica” y que vestía muy bien. Estos son los datos que EL ESPAÑOL Noticias de Castilla y León ha podido recabar en su visita por tierras leonesas en un sábado de abril.

Valderas hubiera sido un buen lugar para reflexionar. Un pueblo tranquilo, donde en ocasiones parece que el tiempo se ha parado para disfrutarlo mejor. Eso sí, mejor que no lo hagan en fin de semana, sus restaurantes, famosos como Rebeco o Gatitos, se llenan para disfrutar de su plato estrella. 

Bacalao al estilo Valderas, uno de los platos favoritos de Pedro Sánchez

En el centro de la diana

Tras su paso por Valderas, Begoña dirigió su vida profesional a lo empresarial. Es licenciada en Marketing por la ESIC de Madrid y posee un máster en Administración de Empresas. En la actualidad, es la directora de un máster en la Universidad Complutense sobre Transformación Social Competitiva, precisamente es aquí cuando ha podido tejer lazos con otras empresas y de donde viene toda la polémica.

Sin embargo, el perfil discreto de esta ‘muchachita que pasaba sus veranos en León’ se ha visto salpicada por las acusaciones sobre sus contactos con Globalia, matriz de Air Europa y sus cartas de recomendación a empresas. Informaciones publicadas en otros medios y que forman parte de la denuncia de Manos Limpias que han sido la gota que ha colmado el vaso de su marido.

En lo que el líder socialista toma una decisión, esta pareja puede pensar que siempre les quedará Valderas. Y su bacalao.