El senderista de 72 años que se había separado hace dos días del grupo con el que realizaba la ruta de Las Brañas, en el término municipal leonés de Caldas de Luna, ha sido encontrado sin vida hoy a las 17.35 horas en un paraje cercano al túnel del Negrón.
La alerta de su desaparición se recibió en la sala de operaciones del 112 de Castilla y León a las 17.09 horas del 25 de junio, activándose de inmediato el Centro Coordinador de Emergencias (CCE) para coordinar la búsqueda. Desde la Agencia de Protección Civil y Emergencias se desplegó un amplio dispositivo con el fin de localizar al senderista a la mayor brevedad posible. Este dispositivo incluyó la movilización de todos los recursos disponibles desde el Centro Coordinador de Emergencias de la Junta de Castilla y León.
El operativo se prolongó durante dos jornadas completas y ha contado con la participación de diversas unidades especializadas. Se realizaron búsquedas aéreas, incluyendo vuelos nocturnos equipados con dispositivos de infrarrojos, en los que participaron el helicóptero de rescate del Grupo de Rescate y Salvamento, un helicóptero de la Guardia Civil, la unidad de drones Fénix de la Junta de Castilla y León y la unidad Pegaso de la Guardia Civil.
Además, se llevaron a cabo búsquedas terrestres con la colaboración de la Unidad de Apoyo Logístico en Emergencias (UALE), el puesto de mando avanzado (PMA) y voluntarios de las Agrupaciones de Protección Civil de Riello, La Robla, La Pola de Gordón, San Emiliano, Cuadros y Villablino. Todo esto se realizó en coordinación con la Guardia Civil, que desplegó tres unidades del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (Greim) de Sabero, Mieres y Trives, la Unidad Cinológica, agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) y patrullas de Seguridad Ciudadana. También participaron agentes de Medio Ambiente, bomberos de la Diputación de León y personal del Grupo de Intervención Psicológica en Desastres y Emergencias.
Para la operación de búsqueda, se elaboró una cartografía específica que consideraba criterios técnicos como zonas rastreadas, vegetación, caminos y rutas, delimitando un área de casi 300 hectáreas que fue minuciosamente inspeccionada por todos los recursos disponibles en la zona.