Denuncian el "mal funcionamiento" del canal de venta de billetes de Renfe en León
CCOO ha señalado que el sistema provoca "muchos fallos", con billetes anulados técnicamente que computan como vendidos o errores en las devoluciones
22 julio, 2024 11:14El sindicato Comisiones Obreras (CCOO) ha denunciado este lunes el “mal funcionamiento” y los “múltiples errores y fallos” del nuevo sistema de venta de billetes de Renfe implementado a finales de febrero, cuya “nefasta situación” afecta “a los trabajadores y viajeros” en León.
Desde el sindicato han explicado que, cinco meses después de su puesta en marcha, el sistema provoca “muchos fallos”, como billetes anulados técnicamente que computan como vendidos, errores en las devoluciones pagadas por Pay Pal, cupos de plazas erróneos, imposibilidad de selección de plazas, problemas con la impresión de los billetes, errores en tarifas con descuentos, desglose de billetes combinados para poder indemnizar, imposibilidad de cambios de billetes, errores de las máquinas de auto-venta que después se derivan a las taquillas, cobro de billetes no generados o caídas sistemáticas del sistema.
Frete a ello, CCOO ha asegurado los trabajadores han reportado “numerosas incidencias” por esta situación, al tiempo que han presentado partes de información de riesgos por los riesgos psico-sociales que conlleva, al generar “situaciones de mucho estrés y ansiedad”.
“No se puede admitir que se implante un nuevo sistema con cambios sustanciales sin que haya sido comprobado previamente y que se ensaya sobre la marcha en el trabajo diario del canal de venta, haciendo padecer la incompetencia de algunos al colectivo del canal de venta y a los propios usuarios y repercutiendo en un desprestigio enorme de la empresa”, han lamentado desde Comisiones Obreras, para quienes es “muy urgente una solución definitiva a toda esta problemática”.
Además, han advertido de que la cuestión “se agrava todavía más” debido al “mal funcionamiento” de la venta telefónica, máquinas auto-venta, web y ‘app’, ya que “todos los fallos en estos servicios acaban confluyendo en el canal de venta presencial y recae injustamente y de manera directa sobre el personal, que en ocasiones tienen que soportar insultos y agravios”.