Casi 2.500 días (hace 6 años y 8 meses) lleva Javier Avellaneda sin poder estar con su hijo Alejandro de 14 años, pese a tener concedida la custodia compartida desde 2014 y contar con una sentencia del Tribunal Supremo que asegura que su exmujer cometió una sustracción de menores, hasta en dos ocasiones, por lo que la inhabilita para el ejercicio de la patria potestad que está en vigor durante cinco años. «Las sentencias no se ejecutan. Te dan la razón, pero luego no se llevan a cabo y unos por otros no la ejecutan por el mero hecho de ser mujer. Si mi hijo no está conmigo es porque no han querido, tanto la madre como los jueces y las fuerzas de seguridad», afirma lleno de impotencia.
El palentino asegura que no tiene ninguna condena ni denuncia, “cosa que no puedo decir de mi ex” que “está condenada penalmente y en sentencia firme, por abandono de familia, por no llevar a mi hijo al colegio durante seis meses”, lo que supuso un 92% de falta a clase durante el curso escolar. Por esto, la multa fue siete meses de condena a 6 euros al día, unos 1.620 euros “demasiado barato cuando la educación es obligatoria”, apunta.
Esa sentencia, sumada a las dos que tiene posteriormente por sustracción de menor al no entregar a su hijo a Javier, tal y como dicen los autos de Primera Instancia, con condena de dos años por cada una, (pruebas que Avellaneda entrega a este periódico), provocan que la madre tendría que entrar en prisión, algo que haría que se le devolviera a su hijo de manera inmediata. “Llevo tiempo solicitando la ejecución de sentencia del Tribunal Supremo y a fecha de hoy con custodia compartida en vigor, sigo privado de ver a mi hijo. Mi ex mujer es una secuestradora”.
El 'modus operandi'
Este hombre recuerda que el ‘modus operandi’ de las “secuestradores” es este de no llevar al niño al colegio, y pone de ejemplo casos famosos como los de María Sevilla, Juana Rivas, Verónica Saldaña, las madres de Infancia Libres como han denunciado también desde la Asociación de Custodia Compartida de Valladolid. Considera que no es una “opinión” lo que dice, ya que son hechos”. “No lo digo yo, lo dice la Ley de Enjuiciamiento criminal: cuando tienes antecedentes y tienes una condena de prisión tienes que entrar a la cárcel”. Hay que recordar que el pasado mes de abril, el Supremo desestimó el recurso de la madre contra un fallo de la Audiencia que a su vez ratificó una sentencia del Juzgado Penal que le imponía dos años de cárcel.
Avellaneda echa la culpa de esta situación a los “jueces prevaricadores de Palencia que aplican la ley según si eres hombre o mujer”, lamenta y no entiende cómo el juzgado de lo Civil de Palencia, “no haya retirado la custodia y la patria potestad” a su ex siendo conocedores de los informes psicosociales. Avellaneda carga contra jueces y también contra las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado: “por su inoperancia y su colaboración y connivencia con ella”. Además, afirma que hay varios informes psicosociales que aseguran que su ex “ejercía mala influencia” sobre su hijo. Fue en el sexto informe cuando se le entregó la custodia total al padre. Posteriormente los jueces “se han saltado la ley y no hacen casos a estos informes”. Por este motivo insiste en que los magistrados “están prevaricando, no es una hipótesis o un supuesto, es una certeza porque el delito es claro”, en relación a la no aplicación de los artículos 158 y 194 “teniendo claro”.
El caso de Javier no es único. Como él, cientos de padres son víctimas de lo que se conoce como un secuestro parental o sustracción ilícita de menores. Sin embargo, opina que con la condición de tener una sentencia del TS a favor, “creo que soy el único”, matiza.
#LibertadparaAlejandro
Se ha movido mucho en las redes sociales. En TikTok y en Twitter no se cansa de luchar por su hijo y ha creado el hashtag #LibertadparaAlejandro con la intención de dar a conocer el caso. Pero ahora también ha enviado una carta al comisario de Justicia de Europa “documentado lo que me está pasando” y en breve lo hará con una carta a la comisaria Policía de Segovia y Palencia para ponerles en conocimiento que “hay una mujer condenada por sustracciones y se está cometiendo un acto delito y deben detenerla tal y como dice el código de la Policía”.
Este padre no se cansa de “hacer ruido” para que se conozca lo que está pasando en Palencia. “No quiero que pase a nadie más porque no hay nada más duro en esta vida que el daño que se le está haciendo a un menor cuando se le elimina la figura del padre. Ese daño es irreparable”, lamenta. Mientras piensa en el “futuro de nuestros hijos”. “Muchos padres están pasando por este trago y no saben a lo que se enfrentan. No están solos”, advierte, ya que ha creado en Palencia una asociación de padres por la custodia compartida formada por más de 200 personas. Además, aprovecha para recordar que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aseguró que en España “se cumple la ley”, pues bien, critica Avellaneda, “ahora es el momento de que se cumpla, o no se hace por ser mujer y la presión mediática. Tengo claro que si fuera al revés yo llevaría mucho tiempo en prisión”.
No entiende por qué el Juzgado de Palencia “alarga en el tiempo” el ejecutar la sentencia. “Estamos en pleno siglo XXI y una mujer que ha secuestrado a su hijo y hay dos sentencias que lo dicen. Una ratificada por el Supremo, otra por la Audiencia Provincial, que espera que sea firme a través del TS en los meses inminentes. Una madre con una condena de cuatro años de prisión a cargo de un niño que no tiene la patria potestad. Esta mujer tenía que estar en la cárcel hace muchos años pero judicialmente no se mueve un dedo. Esto es un negocio”. Ante esto, ha realizado un escrito ante el Tribunal Penal de Palencia para que ejecute la sentencia, “y podemos estar varios meses con ello y yo sigo sin poder estar con mi hijo cuando la madre no tiene ni la patria potestad”.