Las movilizaciones de las organizaciones agrarias en Palencia el pasado miércoles, 14 de febrero, han dejado un profundo malestar entre sus convocantes. Y es que Asaja, UPA y COAG han saltado al ataque directamente contra el subdelegado del Gobierno en la provincia, Ángel Domingo Miguel, a quien han pedido la dimisión por su "pésima gestión" de estas acciones de protesta.

Así, han relatado que en su búsqueda de cooperar con las autoridades para garantizar la seguridad, canalizar la movilización dentro de la legalidad y ocasionar los menores trastornos posibles a la población, se han encontrado una "arbitraria interpretación" de la Constitución Española del subdelegado del Gobierno en Palencia. En este sentido, han añadido que parece haber obviado el artículo que reconoce "el derecho de reunión pacífica y sin armas" que tienen los ciudadanos y cuyo ejercicio no necesita autorización previa. Además, han aclarado que basta con comunicación previa a la autoridad y que ésta solo podrá prohibirla si hay razones fundadas de alteración del orden público, con peligro para bienes o personas.

Hablan de una actitud "sibilina, astuta y pilla" por parte de domingo Miguel, quien ha "buscado sucesivamente la desmotivación" de la protesta de las organizaciones, llegando a promover su "disolución o confusión con otras movilizaciones de carácter espontáneo y puntual". "Llegado el día de las tractoradas, se produjeron cambios sobre la marcha para confundir a los participantes y para minimizar la repercusión solidaria que estas manifestaciones encuentren en la sociedad y en los medios de comunicación palentinos", han afirmado.

Por ello, creen que el subdelegado ha "alimentado el malestar" de ganaderos y agricultores, a quienes han agradecido su comportamiento "ordenado y pacífico" sin responder "a las provocaciones" que suponían los cambios de las rutas previstas impulsados desde la Subdelegación del Gobierno.

Además, han agradecido a las fuerzas del orden público su trabajo, cooperación y profesionalidad para el "buen desarrollo" de la manifestación. Asaja, COAG y UPA se sienten "estafados" por la Subdelegación del Gobierno, con quien siempre se pusieron a su disposición para organizar una marcha "ejemplar, con arreglo a la legalidad y en el ejercicio de su legítimo derecho constitucional".

Así, ponen de ejemplo de estas "maniobras" de la Subdelegación que la tractorada que venía desde Magaz de Pisuerga se le prohibió circular apenas dos kilómetros del "último tramo por la autovía A-610 hasta Palencia", forzándose "sin justificación a los tractores" un desvío de cerca de nueve kilómetros por la vía secundaria que bordea la factoría de Renault en Villamuriel y a un parón añadido de 20 minutos, provocando un retraso a su llegada al recinto ferial.

De la misma manera, ya en la capital, "con la excusa de unas obras inexistentes", impidieron a los tractores llevar a cabo el recorrido inicial acordado desde el Ferial por las avenidas Cardenal Cisneros, Valladolid y Modesto Lafuente, redirigiéndolas hacia la avenida Manuel Rivera por el Paseo de Nuestra Señora de los Ángeles. "Todo con el objetivo de reducir visibilidad de una masiva participación en las protestas por la gravísima crisis que padece el sector agroganadero", han denunciado.