Iberdrola proporcionará a los supermercados Alcampo 3.740 GWh de electricidad, o lo que es lo mismo, lo que equivale al consumo de 62.000 familias españolas al año. Lo hará a través de varias de sus instalaciones fotovoltaicas durante 11 años. Y esta energía procederá en gran parte de la planta fotovoltaica de Velilla, en Palencia. Tiene una capacidad de 350 MW y de los parques, también fotovoltaicos, Tagus I-IV, situados en Alcántara (Cáceres), con 200 MW.
De esta manera, Iberdrola amplía sus alianzas para la descarbonización de la economía española. La eléctrica presidida por Ignacio Galán suministrará energía verde a todos los hipermercados y supermercados de Alcampo en España a través de un contrato de compraventa a largo plazo (más conocido como PPA, por sus siglas en inglés). Desde Iberdrola, Sergio Hernández de Deza, director de Grandes Clientes, PPAs y Soluciones Industriales de Iberdrola, señala: “Esta alianza impulsa el objetivo de lograr la descarbonización de la industria, esta vez con Alcampo, una de las cadenas de distribución más importantes en España. Es una prueba más de que garantizamos la seguridad energética, la sostenibilidad, la estabilidad de precios y la competitividad a través de energía limpia que promueve la descarbonización”.
La lucha contra el cambio climático es uno de los objetivos esenciales de Alcampo desde el año 2008, momento en el que dio sus primeros pasos hacia la descarbonización de su actividad. Trabajando en esta línea, en el año 2018 comenzó a consumir en sus centros energía procedente de fuentes 100% renovables, alcanzando las cero emisiones netas en el alcance 2 de su Huella de Carbono en el año 2019. Ya en 2023 la compañía definió unos objetivos ambiciosos que han sido aprobados por el SBTi, comprometiéndose en los alcances 1 y 2 a una reducción de emisiones del 46% en 2030 y alcanzar la neutralidad climática en 2043; alineándose de esta forma con el Acuerdo de París para evitar que la temperatura del planeta suba más de 1,5ºC. En lo que respecta al alcance 3, en 2030 Alcampo ha fijado el objetivo de reducir un 25% las emisiones de CO2eq debidas a la logística y comercialización de productos.