Afectado, pero reflexivo se presentaba Ramón María Calderé en la rueda de prensa tras la derrota del CF Salmantino, que cerraba con un claro mensaje: “Esto no se ha acabado y confío en revertir la situación”, una frase que espetaba tras reconocer que “no estoy descolocado, pero sí decepcionado, decepcionado conmigo mismo lo primero”, señalaba.

El técnico asumía la derrota y los errores, aunque analizaba el encuentro y señalaba que “me custa entender situaciones que se dan. Tanta ansiedad y es algo que me preocupa porque durante la semana el equipo está bien y otra vez en casa… demasiada ansiedad. Igual desde que estoy aquí en casa no está bien. Habrá que averiguar rápidamente el por qué de esa ansiedad”

También aludió a la posición de Saúl Villalobos, que jugó como lateral izquierdo: “Asumo la opción de poner ahí a Saúl. Ya había jugado en México de lateral y quería que Saúl tirara hacia arriba para alejar a Zubi, pero no ha salido como esperaba. Ya han pasado las tres semanas que decía para que el equipo se pareciera a lo que yo quería y es cierto que como entrenador es la peor racha que he vivido. Ahora es momento de ver la reacción de los chicos y la mía también, porque es cierto que el equipo está peor que cuando yo lo cogí. No me voy a excusar. El equipo está trabajando bien y si hay algún responsable soy yo. Hay un blanco fácil que soy yo y yo quiero que sea así”, comentó, a la vez que volvió a alabar a la afición.

“Es normal que expresen su malestar porque lo que quieren es ver ganar a su equipo. Ellos son los reyes, por así decirlo, de esto, porque sin ellos no habría fútbol, y yo no les puedo pedir más, porque han estado siempre con el equipo. Por eso es normal que luego expresen ese malestar”, sentenció.