"Populorum Progressio tiene una correcta comprensión antropológica del ser humano"
La 'Cátedra Ruffini' de la Facultad de Teología de la Universidad Pontificia de Salamanca (UPSA) ha organizado una mesa redonda titulada 'El progreso de los pueblos y el desarrollo humano integral a los 50 años de la encíclica Populorum Progressio de Pablo VI'.
En el acto, el profesor de la Facultad de Economía de la Universidad Católica de Ávila, David Sanz Bas, y el profesor de la Facultad de Teología de la Universidad Pontificia de Comillas, José Manuel Caamaño López, han analizado las aportaciones y la interpretación actual que aporta la encíclica sobre el progreso de los pueblos, después de medio siglo de su publicación. La mesa redonda ha estado moderada por el profesor de la Facultad de Teología de la Universidad Pontificia de Salamanca, José Antonio Calvo Gómez.
Durante su intervención, Sanz Blas ha destacado los aciertos y errores económicos de Populorum Progressio. Para el profesor, "la encíclica tiene una correcta comprensión antropológica del ser humano". El conferenciante ha destacado como aciertos: la correcta definición del desarrollo económico "entendida como un desarrollo cultural y social del individuo"; el valor de las instituciones tradicionales siempre que contengan valores humanos. "Las instituciones tienen mucho conocimiento heredado desarrollado durante generaciones y es un acierto". También ha destacado la valoración equilibrada de la herencia colonial y la no estigmatización del empresario ni del trabajador "la normalidad del tratamiento del empresario es muy importante".
Además, el profesor se ha referido a la defensa de la moral, en la encíclica, como fundamento de la economía "porque una sociedad no puede progresar si se olvida de la moral". Para Sanz Blas, la encíclica presenta varios errores entre los que ha destacado: la quimera del control de los precios "porque considera que hay que regularlos para que sean más justos y eso es una disfuncionalidad"; la quimera de la planificación económica "ya que justifica que el Estado tiene que planificar las líneas de la economía"; la quimera del proteccionismo "porque considera el comercio internacional como algo negativo, pero el proteccionismo nacional nunca crea industrias eficientes"; y la quimera de la ayuda al desarrollo "ningún país se va a desarrollar con ayuda al desarrollo, realmente se refiere a ayuda humanitaria que sirve para paliar necesidades".
El profesor Calvo Gómez ha realizado una visión retrospectiva de la encíclica, que profundiza en las instituciones generadas en el Concilio Vaticano II sobre la problemática del desarrollo de los pueblos. "Hay autores que la califican como encíclica explosiva, lo que refleja el dinamismo propio de la Iglesia". Para el profesor, "Populorum Progressio es una respuesta de la Iglesia a la situación social marcada por el subdesarrollo". Para el experto, la encíclica ha propuesto una visión global del hombre y de la humanidad y su defensa del hombre de una manera integral. También ha destacado la definición de 'desarrollo' considerado como "el paso para cada uno de condiciones de vida menos humanas a condiciones más humanas". Y se ha referido a la visión integral de la encíclica "que engloba a la realidad pluridimensional del ser humano" y a su dimensión social "ya que considera que la solidaridad universal es un deber".
Las jornadas, celebradas también en Madrid, han sido patrocinadas por la Sociedad de Servicio Social Misionero.