El Ayuntamiento de Béjar ha organizado un intercambio juvenil con la localidad portuguesa de Pinhel dentro de las actividades que se están llevando a cabo en el campamento juvenil de verano y que desarrollan los monitores de Bejuven.

Se trata del primer Intercambio juvenil europeo entre Béjar y Portugal que promueve el Ayuntamiento de Béjar con el objetivo de que los jóvenes conozcan la cultura y la historia del país luso, del que Béjar recibe al año a un buen número de esquiadores y turistas. Pinhel es una localidad portuguesa con la que Béjar lleva colaborando desde hace tiempo en cooperación trasfronteriza y se encuentra a dos horas y media de la localidad.

A las 8:30 de la mañana un grupo de 39 niños y 10 monitores salían para Pinhel para participar en las diferentes actividades que la localidad portuguesa les había preparado. Por la mañana, visitaron la casa de Cultura donde les mostraron un video con la historia y tradiciones de la localidad. A continuación, los chicos pudieron conocer de primera mano muchos de los lugares que habían visto en el video en su visita por el casco histórico. Una parada para comer con los niños portugueses de un campamento de Pinhel les sirvió para conocer la gastronomía del país luso.

Ya por la tarde, los bomberos y un equipo de rescate de la ciudad les habían preparado varias actividades físicas como carreras de obstáculos. Al término, los chicos pudieron disfrutar de varios juegos acuáticos una piscina temática que tenía el fondo rojizo para simular las cubas de una bodega, principal actividad de la zona. Al finalizar esta actividad los niños retornaron a Béjar.

En su visita los chicos bejaranos estuvieron acompañados por el edil de Juventud y Turismo, Ángel Orgaz, y la concejal de Cultura, Purificación Pozo, quienes mantuvieron una reunión con el presidente de la Cámara de Pinhel quien les mostró su interés de dar continuidad en el tiempo a este programa de intercambio. Así la próxima cita será en agosto cuando Béjar recibirá a los chicos de Pinhel.

Finalmente, también se acordó un nuevo intercambio multicultural de más días entre las dos localidades. Los chicos portugueses vendrían a La Covatilla a esquiar y los bejaranos irían a Pinhel.