STES rechaza "frontalmente" las propuestas de educación hechas por Casado

La Confederación de STEs-intersindical y STECyL-i quieren manifestar, mediante este comunicado, su más absoluto rechazo a las propuestas que en materia de Educación acaba de realizar el Partido Popular, a través de su presidente, en un acto de precampaña. Las declaraciones que el pasado sábado, 6 de abril, realizó Pablo Casado en un mitin en Salamanca, constituyen para esta Confederación una auténtica declaración de guerra contra la enseñanza pública.

En efecto, las propuestas que el Partido Popular hace por boca de su presidente son una auténtica provocación que originará un conflicto escolar en el caso de llevarse adelante por parte de un gobierno sustentado por dicho partido. STECyL-i y la Confederación de STEs-i quieren, en primer lugar, expresar su rechazo a las propuestas del líder del PP de ampliación del régimen de conciertos a todos los tramos no obligatorios del sistema educativo con la consiguiente asignación de más fondos públicos a los negocios privados de la educación. Los STEs-i no podemos por menos que manifestar nuestra indignación con un partido político responsable de unos recortes durísimos que se ensañaron con la enseñanza pública durante los años del gobierno de Rajoy, y que ahora, cuando aún no se han revertido todos ellos, pretendan lanzar una nueva ofensiva favoreciendo a la red privada en detrimento de la pública.

No menos alarmante es la propuesta que también acaba de exponer esta formación política en Salamanca sobre la Alta Inspección: proyectan reforzar su autoridad dotándola, entre otras cosas, de facultades sancionadoras. De las palabras de Pablo Casado se desprende que tienen la intención de convertir a este servicio en una especie de policía educativa dirigida desde el Ministerio para controlar, tanto a las diferentes administraciones educativas autonómicas, como al propio profesorado. Esta confederación rechaza la intención recentralizadora que inspira esta propuesta, y denunciamos los recelos que este partido político parece tener en contra del profesorado al que quiere controlar, coartar su libertad y fiscalizar desde el Ministerio de Educación. Lanzar insinuaciones contra los y las docentes, como acaba de hacer Pablo casado, deslizando la necesidad de vigilar a todo un colectivo profesional para que no caiga en supuestos adoctrinamientos es indignante, y, demuestra a nuestro juicio, una supina ignorancia llena de prejuicios contra la profesión docente.

Esta confederación también está muy preocupada con la parte del discurso de Casado en la que planteó imponer el castellano como lengua vehicular en todo el Estado. Nuestra organización siempre ha defendido que las lenguas oficiales de los territorios sean lenguas vehiculares para garantizar su normalización, y porque de esta manera se puede trabajar desde la escuela para una verdadera y necesaria integración y cohesión social. Romper con uno de los consensos básicos que ha sustentado el sistema educativo en una serie de territorios del Estado que tienen lenguas propias, no solamente empobrecerá el sistema educativo, sino que implicará el generar de forma gratuita un gravísimo conflicto suscitado únicamente por la irresponsabilidad de la actual dirección del Partido Popular.

La extensión de los conciertos con la red privada en detrimento de la escuela pública, la recentralización y el control desde la Alta Inspección, la imposición de una única lengua vehicular en todos los territorios, así como otras propuestas que esbozó Pablo Casado y que no hemos analizado en esta nota por razones de espacio (vuelta a las reválidas, evaluaciones públicas de los centros y del profesorado, …) constituyen un programa en materia educativa absolutamente sombrío, una vuelta atrás a la LOMCE y a los peores tiempos del ministro Wert, o incluso peor. Con todo ello, la Confederación de STEs-i no dudará en hacer un llamamiento a las diferentes organizaciones que representan a la comunidad educativa de la enseñanza pública, para movilizarse contra estas propuestas si es que, en un momento determinado, un gobierno del PP se decide a llevarlas adelante.