Guijuelo honra a San Isidro Labrador
El alcalde, Francisco Julián Ramos Manzano, acompañado por parte de la corporación municipal así como por los alcaldes pedáneos de Campillo, Rosa Hernández y de Cabezuela, Primitivo Rodríguez, participaba esta mañana en los actos programados con motivo de la festividad de San Isidro Labrador.
“Es una fecha muy entrañable en la que el Ayuntamiento quiere acompañar a los agricultores y ganaderos de las localidad”, apuntaba el primer edil quien destacó cómo, “aunque la Villa sea eminentemente industrial, no puede olvidar sus orígenes ganaderos”. “Quiero agradeceros cómo os habéis portado conmigo durante estos 16 años en los que he estado al frente del Ayuntamiento”, dijo el alcalde a modo de despedida.
“Para mí- continuó- es un honor haber encabezado un pueblo como Guijuelo y acompañaros en la fiesta de los agricultores y ganaderos que con la esencia de un pueblo como el nuestro, ahora eminentemente industrial”. “Solo puedo daros las gracias, pero unas gracias de corazón”, recalcó. A estas palabras, Pedro Julián, presidente de la Junta Agropecuaria Local correspondía agradeciendo al actual alcalde si dedicación a ganaderos y agricultores. “No solo porque siempre nos has acompañado en una festividad como la de hoy sino porque nos has ayudado en nuestras necesidades”, añadió.
A las 12,00 horas comenzaba el programa festivo con la celebración de una misa, oficiada por el párroco, Andrés González en la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, tras la cual se procedía a sacar al santo en procesión por las calles del municipio que van desde la parroquia hasta la zona del CEIP Filiberto Villalobos. Allí, en un campo cercano, el párroco junto a los representantes de la corporación municipal, alcaldes pedáneos y miembros de distintas asociaciones así como integrantes de la Junta Agropecuaria Local y demás participantes, procedieron al tradicional ritual de bendición de campos.
Pedro Julián, presidente de la Junta Agropecuaria Local destacó el perjuicio que ha supuesto este año la escasez de lluvias para cultivos como el del cereal y los pastos. “Va a ser un año difícil pero como los ha habido siempre”, apuntaba resignado aunque satisfecho de ver cómo cada año se mantiene el sector en la Villa. “A la gente joven le cuesta incorporarse por aspectos burocráticos, especialmente por las normativas de Europa, que hacen que los jóvenes prefieren optar por otros trabajos en la industria a independizarse crear una explotación para ellos mismos”, puntualizaba.
Tras la bendición de campos, los participantes en la fiesta pudieron disfrutar, en la sede de la Junta Agropecuaria Local donde se colocó la imagen de San Isidro, de un vino de honor.