Ranquines cumple tres años con su situación más difícil pero sin desfallecer con 134 personas atendidas
El centro Ranquines para personas con problemas de salud mental celebra ya su tercer aniversario en un tiempo en el que ya han atendido a un total de 134 personas.
Para este especial día se ha organizado un programa especial de radio con los participantes del proyecto para el próximo lunes, 28 de septiembre, a las 11 horas en Radio USAL y también podrá escucharse en la web de Cáritas y en las redes sociales.
Antes, sin embargo, el domingo, fecha del aniversario, tendrá lugar un acto con las entidades promotoras y las instituciones que dará comienzo a las 12 de la mañana con la presentación de dicho programa y continuará con la celebración de la eucaristía en la capilla de los Misioneros Paúles.
El director del centro de día, Francisco Berbegal, señala que “en el primer aniversario dijimos que fue la confirmación de que un Centro de día de salud mental de nuestras características era efectivamente necesario en la provincia de Salamanca. En el segundo aniversario dijimos que los datos y el trabajo realizado nos hablaban de consolidación del proyecto. ¿Qué podemos decir del tercer año de funcionamiento? Vamos a apoyarnos en tres conceptos para compartir nuestra reflexión sobre este tercer año del Centro de día Ranquines".
Así, comienza hablando de estabilidad. Y es que durante el presente año han solicitado atención 69 personas, cifra similar a los dos años anteriores. De ellas, el 19% procedía de las administraciones públicas, un 26% por iniciativa propia o familiar y un 55% de asociaciones privadas.
De ellas, 65 personas han participado en las actividades de intervención; de las que un 62% han sido hombres y un 38% mujeres, (manteniéndose los porcentajes del segundo aniversario). De las personas atendidas, 33 de ellas estaban en situación sin hogar o exclusión social, y otras 7 en situación de vulnerabilidad por el aislamiento social; lo que alcanza el 62%.
El Centro de día cubre cada mes sus 40 plazas, acudiendo unas 25 personas diariamente. Este año se han producido 19 bajas, 7 de ellas terapéuticas, bien porque las personas han conseguido sus objetivos o bien porque han sido derivados a un recurso más adecuado a sus necesidades. La media de permanencia ha sido de 11 meses.
Por otro lado, el coordinador del proyecto habla de incondicionalidad: “Más de la mitad de los doce últimos meses el mundo entero, y nosotros con él, está inmerso en una pandemia. Esta situación tan extraordinaria nos está poniendo a prueba a todos. Los recursos sociales hemos tenido que agudizar el ingenio. Cáritas Diocesana de Salamanca está haciendo todo lo posible por estar cerca de los que peor lo están pasando, por ayudar, por poco que sea, porque cada gesto cuenta. En Ranquines nos hemos esforzado para que los participantes sintieran nuestro apoyo de forma incondicional", dice.
Y para finalizar habla en este tercer aniversario de resiliencia. "Nadie puede dudar que la situación ha sido, y es, adversa emocional y psicológicamente para todos, y especialmente si partes con una patología mental de base. Los participantes de Ranquines han tenido resiliencia frente a la situación de pandemia y confinamiento", insisten desde Cáritas.
De esta manera, el equipo hace una valoración positiva en la vivencia de esta situación aunque hayan sufrido. "Ha habido cuatro ingresos en psiquiatría, dos recaídas en consumo, dos idas a urgencias e, incluso, un fallecimiento, pero hay que adaptarse, levantarse y aprender”, comenta Berbegal.
En cuanto a los retos que se marcaron el año pasado, se encontraba el de avanzar en la fase de los pisos de inserción y en extender el trabajo a las zonas rurales. Pese a las dificultades del año, de esta manera, se ha acompañado a quince personas de municipos fuera de Salamanca y se ha comenzado una nueva estrategia para la vivienda de manera que varios participantes alquilan un piso y reciben apoyo y acompañamiento por parte del equipo de Ranquines.