El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Salamanca ha instado al equipo de Gobierno municipal a elaborar unas nuevas ordenanzas fiscales para recoger las necesidades generadas por la pandemia. Entre ellas, dicen, se encuentran la exención de tasas o la bonificación de impuestos, encaminadas ambas a mejorar la liquidez de las actividades económicas afectadas o que están sufriendo de manera significativa la crisis. 

En esta misma línea, el Grupo Socialista estima que los presupuestos municipales para el año que viene deben plantearse en clave de establecer una política de gastos destinada a reforzar las políticas para favorecer el desarrollo económico e industrial en la ciudad. Las actuales circunstancias, afirman los concejales del PSOE, “puede suponer el que se hagan y se realice un esfuerzo para que en la ciudad de Salamanca se generen nuevas oportunidades y nuevos empleos vinculados a sectores pujantes como el científico y el tecnológico aprovechando las sinergias con las universidades”.

Es indudable, se apunta desde el Grupo Socialista, que tanto las ordenanzas fiscales como los presupuestos municipales son los principales instrumentos del Ayuntamiento de Salamanca para abordar desde el punto de vista económico y social las consecuencias de la pandemia en nuestra ciudad. El objetivo primordial de estos instrumentos debe ser la reactivación económica para que, “absolutamente nadie se quede atrás”. De igual manera, el procedimiento de elaboración y su aprobación tiene que tener como base y sustento “la negociación con agentes económicos y sociales de la ciudad, y con todos los grupos políticos representados en el Ayuntamiento”.

Por último, los concejales socialistas  proponen que se aproveche las últimas medidas anunciadas por el Gobierno de España, en relación con la regla de gasto y el uso de los remanentes, para contribuir y buscar la reactivación económica en la ciudad de Salamanca.  Hay que tener en cuenta, recuerdan los socialistas, que las medidas aprobadas por el Gobierno de Pedro Sánchez permitirán hasta final de año el uso de más de 3 millones de euros, 2.244.501'39 euros del remanente acumulado de ejercicios anteriores, más 793.194'16 euros del superávit de 2019 disponible a la fecha.