La Audiencia Provincial de Salamanca condenó a tres hombres que traficaban con cocaína en las localidades de Santa Marta de Tormes y Cordovilla, tal y como pudo conocer la Guardia Civil. La sala condenó al ‘cabecilla’ a tres años de prisión por un delito contra la salud pública, al igual que a los otros dos condenados, aunque en concepto de cómplices, a los que aplica un año y medio de cárcel a cada uno. Además les impuso multas de 54.000, 600 y 50 euros en concepto de multa, respectivamente.
Según recoge la sentencia, las investigaciones de la Guardia Civil determinaron que estas tres personas venían dedicándose a la distribución y venta a terceros de sustancias estupefacientes, en las dos localidades salmantinas. Los hechos se precipitaron el 12 de octubre de 2019, cuando ‘cabecilla’ transportaba en el vehículo Alfa Romeo un total de 527,26 gramos de cocaína con un grado de pureza del 39,13 por ciento. El traficante tuvo un accidente al salirse de la vía en la salida 326 de la autovía A-66 e impactar con el quitamiedos, así que emprendió la huida a pie al ver a la Guardia Civil, aunque finalmente fue hallado por los agentes escondido en las inmediaciones.
Antes del accidente, sobre las 21.20 horas, el ‘cabecilla’ había mantenido conversaciones con otro de los condenados, al percatarse de que le seguía una patrulla de la Guardia Civil y que están reflejadas en la sentencia. "Vienen, vienen por nosotros eh. Han apagado las luces hermano, tíralo cuando puedas. Tíralo cuando puedas”, le decía. “Lo voy a tirar por la ventana”, respondió. “Vienen detrás nuestra hermano eh, tíralo hermano, tíralo, tíralo, tíralo, no enciendas las luces, vete rompiendo, vete rompiendo hermano a cachos ¿ya has ‘tirao’ todo hermano?”, preguntó el primero. “Sí”, reaccionó. “’Pegaítos’, tira, tira, tira, tira, ya lo puedes tirar porque vienen detrás nuestra, vamos a 160”. “Vida, la policía nos ha pillado. He tenido un accidente, vida, vente".
Asimismo, el ‘cabecilla’, cuando estaba escondido en la autovía, sobre las 22.28 horas llamó de nuevo a su cómplice para pedirle ayuda. “Compadre, sácame da aquí, por favor. Estoy en la autovía en Calzada de Valdunciel. Han detenido a mi madre y a todo el mundo, estoy yo solo, compadre, sácame de aquí, por favor. Estoy en Calzada de Valdunciel, debajo del puente".
En la entrada y registro que se realizó el día 23 de enero de 2020 en el domicilio del ‘cabecilla’, en Santa Marta de Tormes, los agentes hallaron 2.170 euros en efectivo, tres trozos de resina de cannabis con un peso de 49,03 gramos, un envoltorio con 12,58 gramos de sustancia que, tras el análisis oportuno, resultó ser cocaína con una riqueza de 13,58 por ciento, una báscula de precisión con restos de sustancia blanca que, aplicando el 'drogatest', resultó ser cocaína, así como bolsas de plástico y tijeras destinadas a preparar pequeños envoltorios para vender la droga.
Por su parte, el día 18 de diciembre de 2019, se autorizó la entrada y registro en el domicilio de del tercer implicado, donde, al acceder los agentes a la vivienda franqueados por su madre, aprovechó para acudir al cuarto de baño y arrojar al inodoro una cantidad indeterminada de sustancia blanca que, una vez aplicados los reactivos correspondientes, resultó ser cocaína. A su vez, en el interior de la mesilla derecha de su dormitorio se encontró un envoltorio de plástico con 0,08 gramos de cocaína.
Según la sentencia, en el momento de los hechos, el ‘cabecilla’ sufría un agrave adicción a diversas sustancias, entre ellas cocaína y cannabis. Y, durante la tramitación de las actuaciones, colaboró en la administración de justicia en la persecución del delito y en la disminución de los efectos ocasionados.