El complejo hidroeléctrico denominado ‘Sistema Duero’, o ‘Saltos del Duero’, comprende los saltos de Aldeadávila y Saucelle sobre el río Duero y el salto de Villarino sobre el Tormes, en la provincia de Salamanca, y los saltos de Ricobayo sobre el río Esla y los de Villalcampo y Castro sobre el río Duero, en la provincia de Zamora. El río Duero es uno de los más caudalosos de España. Una de sus particularidades consiste en que los mayores desniveles los tiene en el tramo intermedio de su curso, denominado Duero Internacional, inmediatamente antes de internarse en Portugal, tras recoger las aportaciones de su propia cuenca y de dos importantes afluentes, el Esla y el Tormes, que dan forma al Complejo Hidroeléctrico Duero, explotado por Iberdrola, posiblemente el mayor de España en producción de energía hidroeléctrica
Las presas de Villalcampo, Castro y Saucelle (terminada en 1956) son de concepción y características similares, así como las de sus saltos de producción, todos ellos de pie de presa. En los que concierne a la presa de Saucelle, puede considerarse como ‘de transición’, caracterizándose por una mejor adecuación al abrupto terreno. Además, en esta presa se empezaron a utilizar medios más avanzados, algunos de ellos importados tras la terminación del bloqueo internacional de España. Todo ello se tradujo en una mayor calidad de la obra y en una mejora de los plazos. A pesar de que los trabajos eran muy duros, casi todos a mano o, cuando no, con máquinas rudimentarias, pero adelantadas a aquella época.
Ello implicaba grandes costes humanos. Estas grandes obras traían consigo el sacrificio de vidas humanas que eran imposible de evitar en aquellos tiempos, a pesar de cuantas seguridades se tomaran. El número de víctimas alcanzó la cifra de veintidós hombres, y varios más quedaron imposibilitados para el trabajo. El coste total de las obras ascendió a 370 millones de pesetas.
Los antecedentes de la construcción se recogen en un informe de 1924, en el que se preveía en el tramo internacional salmantino una presa en Aldeadávila, con central de pie de presa, y un salto en derivación con la central situada en Saucelle, pero se especificaba que este último podía sustituirse por una serie de presas escalonadas. En la década de los 30 se consideró la opción de construir una sola presa, si bien la altura necesaria para aprovechar todo el salto, que era de 120 metros brutos, se preveía excesiva en aquellos momentos. Al hacer el estudio definitivo del proyecto de Saucelle, que sería el siguiente a construir después de Castro, se fijó otro esquema, esta vez de forma definitiva. La situación de las dos presas cambió ligeramente, situándose la de Saucelle algo más aguas abajo, aprovechando así parte del desnivel que quedaba hasta la desembocadura del Huebra. Las alturas definitivas de las presas se fijaron en 83 metros para la de Saucelle y de 140 metros para la de Aldeadávila.
Un embalse, de 182 hm3 de capacidad, que inunda términos municipales de Saucelle, Vilvestre, Mieza y Aldeadávila, en la orilla española del Duero, y el concejo de Freixo de Espada à Cinta, en la zona portuguesa.
Aunque los trabajos comenzaron en 1950, fue en 1954, cuando el BOE num. 199, del 18 de julio de 1954, el ministro de Obras Publicas, autoriza la construcción del camino de acceso al Salto de Saucelle (carretera desde Hinojosa), ajustándose en lo referente al puente sobre el rio Huebra y al paso del ferrocarril (ramal Fuente de San Esteban-Fregeneda). Posteriormente, se construyó la carretera hasta Saucelle a través de la dehesa Boyal y el camino carretero existente denominado 'del monte'. Con la consiguiente construcción de carreteras y accesos para iniciar las obras de la presa.
Las obras de construcción de la presa
Desde sus comienzos, y al frente de todos los cargos de la dirección de obra, se encontraba el ingeniero de caminos Francisco González González, a su lado el también ingeniero de caminos Luis Olaguibel. La dirección del montaje correspondió al ingeniero industrial Manual de la Puerta. Aparte, estuvieron los montadores de cada una de las casas, que conjuntamente llevaron hasta el final el montaje de las cuatro máquinas. Una vez finalizado el montaje, al pasar todo ello a la sección de Explotación, se hizo cargo del funcionamiento, el ingeniero industrial Sebastián L. Camarasa. Como jefe de la Central, Florentino Boyano, que por ser trasladado a Aldeadávila le sucede Dictinio Alonso. Por traslado a Villarino de este último se hace cargo de le jefatura de la Central Nicolás V. Norato. Igualmente fueron sucediéndose los ingenieros Diego Castillo, José E. Garjón, y, por último, como Ingeniero jefe de la Zona Duero, Antonio Casanova Doñate, que desde Villarino organiza todo su cometido, según recoge un estudio de Claudio Fortín Estévez, de 1976.
Un hito, la desviación del río Duero
Como dato importante y curioso, se puede citar la desviación del curso del río Duero, una vez construido el túnel de desviación, hoy llamado aliviadero, cuya longitud es de trescientos metros. Todo él excavado en duro granito. En su parte superior, para protección y seguridad se construyó un muro de cemento para defensa y contención de las posibles avenidas, que fue demolido por una pega eléctrica la mañana de 18 de Julio de 1953. Una grúa 'Blonding' depositaba los 'Gaviones' (grandes cestos de alambre), que llenos de piedra bien colocada eran depositados en el fondo del río, hasta conseguir la total obstrucción del mismo.
El caudal de agua que había quedado entre una y otra ataguía, fue desalojado por medio de unas potentes bombas. Unas cien horas de trabajo o funcionamiento de las bombas fueron suficientes para quedar en seco o vacío totalmente el llamado Cuenco. Empezó a continuación la excavación y cimentación de la Presa, hasta el final de su coronación, ofreciendo un nuevo paso fronterizo entre España y Portugal, siendo Saucelle y Freixo de Espada à Cinta los municipios cercanos.
La inauguración de la Central, no podía faltar Franco
La Central del Salto de Saucelle se encuentra situada a un kilómetro de la desembocadura del río Huebra, y a unos trescientos metros de la presa. Es del tipo de semisótano, con cuatro generadores, cuya producción máxima es de 240 Mw/h, lo que suponía 1.050 millones de kw/h. Fue puesta en servicio como prueba el 1 de agosto de 1956, siendo inaugurada el día 29 de septiembre del mismo año por el jefe del Estado Francisco Franco. Coincide esta misma fecha con los veinte años de ser elegido 'generalísimo'. Este mismo día, Franco volvió a repetir el acto simbólico en el mismo lugar donde lo fue por primera vez el 29 de Septiembre de 1936, en la Finca San Fernando, de Aldehuela de le Bóveda, propiedad de Antonio Pérez-Tabernero. Una vez finalizado el acto simbólico, toda la comitiva partió en dirección al Salto de Saucelle para su inauguración.
Según los diarios de la época, acompañaban a Franco el feje de las casas civil y militar, Julio Arteche Villabaso (Conde de Arteche), el presidente de la Empresa lberduero S. A., Ricardo Rubio Sacristán, y demás personalidades que para este fin habían llegado.
El jefe del Estado pulsó el botón de arranque de cada uno de los generadores, quedando desde ese momento oficialmente inaugurada le Central del Salto de Saucelle. En el Hotel Dirección de la Empresa fue servido un almuerzo en honor de Franco y su séquito acompañante. Después de un pequeño descanso, el dictador regresó al Palacio del Pardo.
Como bien reconocían las informaciones que acompañaban la inauguración, con la puesta en marcha de esta central hidroeléctrica, se solucionaron en la mayor parte del mercado nacional las grandes restricciones eléctricas, que desde años anteriores se venían padeciendo. Tal fue el suceso, que toda le prensa se hacía eco de como había sido puesta en marcha una de las grandes centrales de la Europa Occidental.
El presente: Aprovechamiento Saucelle-Bajo Huebra
En el año 1989 se inauguró una ampliación del salto inicial. Se trata del salto Saucelle II-Bajo Huebra, que aprovecha el embalse de Saucelle en la primera fase ya construida, y que en una segunda aprovechará las aguas del embalse del Bajo Huebra en la misma central. Es decir, se trata de aprovechar en una misma central hidroeléctrica el agua de los dos ríos mediante la construcción de una presa pocos metros aguas arriba de la desembocadura del Huebra. Un asunto que parece estar muy lejos de hacerse realidad y, más, cuando ese tramo del Huebra está declarado ZEPA (Zona de Especial Protección de la Aves) dentro del Parque Natural Arribes.
Este sistema supone un mejor aprovechamiento de los caudales del Duero por la reducción del agua vertida por el aliviadero de la presa de Saucelle sin ningún aprovechamiento y la concentración de la producción en horas punta. Los trabajos que se llevaron a cabo para conseguir este objetivo fueron los siguientes:
Recrecido de las compuertas de Saucelle, aumentando de esta forma el volumen útil construyendo una nueva central con unos nuevos grupos que aprovechase los volúmenes regulados por Saucelle, en una primera etapa, y por el embalse del río Huebra en una segunda etapa.
Las características del salto de Saucelle
Volumen del embalse: 182 hm3
Volumen útil del embalse: 56 hm3
Salto bruto: 63 m
Turbinas: 4 Francis
Caudal a plena carga: 468 m3/s
Potencia turbinas: 240 Mw.
La gran avenida
La prueba más dura sufrida por esta presa fue la gran avenida, ocurrida en los últimos días 1961 y primeros de 1962, llegando el agua a límites nunca conocidos,según aseguran quienes aún recuerdan aquellos hechos. Todos los aliviaderos permanecían con sus compuertas abiertas al máximo, las cuatro máquinas en marcha, y aún así la cota de embalse rebasó a la cota normal en varios metros. La presa dio muestras de resistencia inmejorable. El temporal de lluvias que venía sucediéndose en los momentos de la gran avenida, dieron lugar a corrimientos del terreno en el embalse. Así aconteción en el término municipal de Vilvestre, en las proximidades de los Olivares. Además, se inundaron el campo de tenis del poblado, el nivel máximo de las aguas lamió las laderas de las viviendas y del Hotel Dirección, ambos desalojados como medida de precaución. En 1989 tuvo lugar otra crecida similar, pero su cota quedó registrada por debajo de la de 1961 en cincuenta centímetros.
El poblado del Salto de Saucelle
Son muchos los lugares en estas tierras con accidentada morfología y acusados contrastes que invitan a la reflexión y el sosiego. Uno de ellos es el poblado del Salto de Saucelle, situado al lado de la presa, y levantado para dar cobijo a las familias de los obreros que la construían. Comienza el funcionamiento de este poblado en el año 1950-51, durante los trabajos que desde los años 1950 a 1960 tuvieron lugar para construir el Salto.
También disponía de un hotel y una residencia, como de cine, iglesia, restaurante, campo fútbol, piscina... y hasta de un cuartel de la Guardia Civil. Además, también tenía sus fiestas patronales, como un pueblo más del Duero, en honor a San Pedro.
Las decenas de viviendas unifamiliares, durante la construcción del salto y después durante su primera explotación, fueron ocupadas por los jefes y empleados que la empresa destinó en este lugar. En estos momentos, pertenece a una sociedad privada y su eso está destinado al turismo, conocido como Complejo Turístico Aldeaduero.