La Catedral Nueva de Salamanca ha acogido este miércoles una misa funeral por el "eterno descanso" del papa Benedicto XVI, fallecido el pasado sábado 31 de diciembre a los 95 años de edad. A la celebración, que ha sido presidida por el obispo de Salamanca, José Luis Retana, ha asistido el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco.
Durante la misa, Retana ha dado gracias a Dios por "su persona, figura y por el legado que nos deja", que ha calificado de "hermoso y sabio" y ha asegurado que seguirá siendo "una luz para tantas personas en la Iglesia".
Mañueco ya mostró sus condolencias en su cuenta de Twitter el día del fallecimiento del papa emérito y recalcó que había fallecido un papa "bueno, intelectual y discreto" que, aseguró, fue querido "por todos" y "tomó decisiones importantes" para la Iglesia Católica.