Escribir de una despedida nunca es de halago. Y más cuando se va una primerísima figura del toreo y, por otra parte, un gran paisano. La tarde en Guijuelo, con casi lleno en los tendidos, estaba preparada para la ocasión. Una gran corrida de Domingo Hernández, esos excelentes toros que pastan en Traguntía, y el cartel con Domingo López-Chaves y Julián López 'El Juli', que andan ya de paseo de despedida, y El Capea, un torero de la casa y 'del' pueblo. Y José Ignacio Cascón lo bordó en la confección y, también, en el conjunto de esta importante Feria Taurina de Guijuelo, que, aunque plaza de tercera, tiene todos los méritos para considerarse de segunda.

Es que, a estas alturas de la profesión, ellos dos de matadores y un simple que escribe, ya sería repetir casi dos docenas y media de años. Qué decir a estas alturas de Domingo, el torero de Ledesma, que agradeció a su Peña López-Chaves de Ledesma los 30 años que han estado ahí, a su lado, en los buenos y en los malos momentos, que los hubo y muy dolorosos. Decir, como ya dije en la Feria de Salamanca del pasado año, que Domingo está de vuelta, que torea para divertirse, que le está saliendo, ahora, al final, toda esa torería que llevaba dentro y, por circunstancias de empresas y otros avatares, no podía por los hierros que le daban en las ferias. Mingo se gusta, transmite, hace todo con el deber de un gran profesional, siempre educado, respetuoso, honesto, mucha honestidad de la que falta en estos tiempos, y cumplidor.

Si algo debemos decir sobre todo lo demás en el adiós es que fue un torero HONESTO. Más allá de si indultó, que también cuenta, o no un toro. Más allá de si toreó mejor por un pitón o por otro. Más allá de arte o técnica. Domingo salió a hombros por su honestidad y profesionalidad. El público estuvo con él, claro, es que transmitía porque todo lo hizo de verdad, con emoción, con el corazón y, contra eso, poco se puede contraponer.

La segunda despedida venía en el esportón de El Juli. Ese hombre ya, aún lo recordamos de niño, que dice adiós tras 25 años de 'jefe' del escalafón. Mandando en el toreo de las dos últimas décadas, y retirándose como una gran figura, de las cinco más importantes del toreo que ahora llaman moderno. De Julián poco se puede decir que no esté ya dicho, reescrito y repetido en miles de crónicas. En Guijuelo estuvo muy agradecido, de maestro, de señor, de caballero, entregado, que ya es decir en estos tiempos, y que cortó tres orejas. Arrancó tres trofeos, que pudieron ser cuatro, por ese poder inconmensurable, la técnica endiablada, el conocimiento del toro y de la lidia y ese manejo de las faenas como pocos pueden realizar. Se va un figurón, nunca me gusta decir maestro, eso queda para los que han creado época, pero sí uno de los mejores de los últimos tiempos.

Finalmente, Pedro Gutiérrez 'El Capea'. Luchó con tesón, se esforzó hasta la extenuación, peleó como un jabato para no salir a pie y, así, acompañar a sus compañeros en la Puerta Grande. Y lo consiguió por eso, por técnica, voluntad y esfuerzo, que también hay que valorar y mucho. Arrancó una oreja a cada toro y, de esta suerte, también participó en esta tarde de los adioses en Guijuelo.

Y la fiesta continuó en la noche. La amistad, la honradez y la vida que salen al camino, ay!

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros de Guijuelo (Salamanca). Tercera de abono. Casi lleno. Toros de Domingo Hernández, el cuarto, de nombre Majadero, número 121, fue indultado.

DOMINGO LÓPEZ CHAVES: oreja y dos orejas y rabo simbólico.

EL JULI: dos orejas y oreja.

PEDRO GUTIÉRREZ ‘EL CAPEA’: oreja y oreja.

Incidencias: Al inicio del paseíllo, en nombre del ayuntamiento, el alcalde, Roberto Martín y el empresario, José Ignacio Cascón, han hecho entrega a López-Chaves y El Juli de un obsequio, pues ambos se despiden de la plaza de toros de Guijuelo.

Festejo para el sábado, 19 de agosto

Día 19 de agosto, sábado

Toros de El Vellosino para:

Sebastián Castella

Alejandro Talavante

Diosleguarde

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