El pleno ordinario de la Diputación de Salamanca, correspondiente al mes de agosto, comienza con un minuto de silencio en memoria de la mujer asesinada ayer en Béjar a manos de su pareja.
Entre otros puntos del orden del día, el pleno, con el voto a favor del Grupo Popular, y las críticas del socialista, que considera "insuficientes", aprueba la creación de una plaza de suboficial, tres de sargento, 11 de cabo y 34 de bombero en el Servicio de Prevención y Extinción de Incendios. Un tema que se supone necesario, y "ajustado a la necesidad", según el vicepresidente segundo Carlos García Sierra, en cuanto la situación en los parques de bomberos comarcales es "preocupante".
Además, el pleno de la Diputación aprueba conceder la Medalla de Oro de la Provincia al Cuerpo Nacional de Policía de Salamanca, una propuesta que fue defendida por la portavoz del Grupo Popular, Pilar Sánchez, "dado el servicio que presta a la provincia y a contribuir a la seguridad de los salmantinos". Una propuesta que fue aprobada por unanimidad y será entregada el día 21 de septiembre, en el Día de la Provincia.
Abastecimiento de agua y colonias de gatos
El Grupo Socialista traslada al pleno de la Diputación de Salamanca los problemas que ha vivido, y vive, la provincia salmantina en cuanto al consumo de agua potable para el abastecimiento humano, una moción que fue aprobada por unanimidad de todos los grupos, con modificaciones incluidas por el Grupo Popular. En la exposición de motivos, el portavoz socialista, Fernando Rubio, critica la "falta de control" por parte de la Junta de Castilla y León, en cuanto a "posibles excesos de uso de plaguicidas y otros agentes nocivos, ni labor alguna de prevención en las zonas de captación o tratamiento del agua, ni ninguna acción para la solución del problema".
Por ello, los socialistas, entre otras cuestiones, insta a la Junta de Castilla y León que haga "todas las tareas necesarias de control de exceso de plaguicidas", así como que la Diputación de Salamanca "lleve a cabo un análisis técnico de las causas concretas del problema para apoyar a municipios y mancomunidades en su solución y prevención".
En este sentido, la portavoz del Grupo Popular, Pilar Sánchez, recordó que el tema de aguas también es "culpa" de la Confederación Hidrográfica del Duero, por lo que "habría que pedir también responsabilidades, no solo a la Junta, sino también al Ministerio". Además, le recordó a Rubio que "no es aceptable que la Diputación asuma competencias superiores de las que les corresponde", en cuanto el Grupo Socialista pide que la Junta "delegue en la Diputación las acciones necesarias con el debido acompañamiento de los fondos necesarios para solucionar este grave problema". Y, finalizó, recordando que "lo principal es solucionar el problema", y, además, pidió incluir también, junto a la Junta de Castilla y León, al Gobierno de España, que se incluyó en el texto. Una buena pelota devuelta por el PP.
El problema de las colonias de gatos en los pueblos de la provincia se ha convertido en un problema de salud. Por lo que el Grupo Socialista trajo al pleno provincial la situación de estas colonias felinas. Además, la nueva ley, que entra en vigor el 29 de septiembre, deja en manos de los ayuntamientos el control de estas colonias. Un asunto que también llevó al diputado de Vox, Celestino del Teso, "buscar soluciones".
Pilar Sánchez, del PP, reconoció que "se le añade a las administraciones locales un problema añadido con la entrada en vigor de esta ley". Una ley, a su entender, que "no ha contado con la opinión de los ayuntamientos ni de las diputaciones". Pero dejó claro que "la Diputación de Salamanca, aunque no sea de su competencia, sí se ofrece como es natural a colaborar con los ayuntamientos", aunque votó en contra de esta proposición. Y, finalizó, que "quien tenía que apoyar a poner en marcha esta ley es el Ministerio, que la ha aprobado".
Lo que no impidió que los socialistas recalcasen que se firmara un acuerdo con el Colegio de Veterinarios de Salamanca para ayudar a los municipios a garantizar la esterilización, desparasitación, vacunación e identificación con microchips felinas porque "es un problema de salud pública". Finalmente, quedó rechazada la moción socialista.