El Consejo de Salud de Ledesma, tras una reunión celebrada días atrás, denuncia la "insuficiencia de personal sanitario" para atender las necesidades de la comarca. A dicha reunión asistieron representantes de los ayuntamientos de Sardón de los Frailes, El Manzano, Monleras, Villaseco de los Reyes, Villarmayor, Villaseco de los Gamitos, Sando, Santa Mª de Sando, Doñinos de Ledesma y Encina de San Silvestre, además de los representantes de los centros educativos y AMPAS y de los profesionales sanitarios. En dicha reunión se analizó la situación vivida durante los meses de verano, que "podría agravarse en el futuro si no se adoptan las medidas necesarias".

En esos meses concurrieron diversas circunstancias que provocaron un deterioro de la calidad asistencial en los pueblos de la zona de salud de Ledesma: las vacaciones o bajas del personal sanitario no sustituidas, al igual que los descansos post-guardia, que tampoco se cubren, con lo que aumenta la carga sobre un equipo mermado; el recorte de la plantilla desde junio, al haber desplazado a uno de los médicos de área, que compartía Ledesma con La Fuente de San Esteban, a este último centro en exclusiva.

Si a ello se añade "la sobrecarga asistencial" debido a que la población residente en la comarca se multiplica durante el verano, "la precariedad está servida". Algunos días estuvieron solo dos médicos para atender toda la zona, con lo que no hubo más remedio que suspender la asistencia presencial en los consultorios locales; pueblos que solo tienen consulta un día a la semana, encadenaron más de una sin atención sanitaria en la localidad.

El centro de salud de Ledesma cuenta con una plantilla de cinco médicos de equipo, cinco enfermeras, y contaba además con dos médicos de área (son los que cubren guardias, bajas o descansos post-guardia), uno de los cuales se ha suprimido de hecho desde el mes de junio. En un equipo humano tan reducido y ajustado al límite, este "pequeño" recorte afecta mucho al buen funcionamiento esperado.

Para hacer frente a esta situación y evitar que vuelva a producirse en el futuro, se adoptaron diversos acuerdos. Así, el primero es mantener una reunión con el gerente de Atención Primaria de Salamanca para exponerle la situación y pedir el mantenimiento de una plantilla mínima –la que existía hasta junio–, de modo que no se ponga en riesgo la atención sanitaria en la zona, como ha sucedido en verano. A tal fin se nombró una comisión con cinco representantes municipales.

Reclamar otro tipo de servicios de los que el centro de Ledesma carece, en concreto una ambulancia con soporte básicoque asegure la rapidez en el desplazamiento en casos de gravedad, una reivindicación que las personas asistentes consideran justa para un acceso a la salud en igualdad que no discrimine a los territorios más despoblados.

Finalmente, los presentes dejan claro que "somos parte de la España vaciada. La precarización de servicios agravará aún más los desequilibrios territoriales. Frente a ello es necesario un compromiso institucional firme para sostener la vida en el mundo rural".