El Ayuntamiento de Santa Marta congela los impuestos y tasas municipales por undécimo año consecutivo. Además, mantiene el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) como uno de los más bajos de la provincia de Salamanca. Así se puso de manifiesto en el pleno municipal en el que el alcalde, David Mingo, ante el hecho de que el Consistorio lleva once años asumiendo las subidas, con el fin de reducir la presión fiscal, aseguró que "los seguiremos haciendo mientras podamos". Y, más, en un momento en que los precios suben y, por tanto, el poder adquisitivo de los vecinos disminuye. Este punto fue aprobado por 16 de los 17 votos posible, contando con una abstención.
Esta congelación de impuestos supone además que Santa Marta siga conservando uno de los IBI urbanos más bajos de la provincia que está en el 0,44, cuando el mínimo legal está en el 0,40. “Estamos hablando del impuesto que afecta a todos, que de una manera u otra todos los ciudadanos tienen que pagar y, por tanto, es el que más sufren las economías familiares. Por eso seguimos haciendo un esfuerzo en ese sentido, porque nuestro objetivo es que el dinero esté en el bolsillo de los ciudadanos y no en las arcas municipales”.
Durante la sesión plenaria, la concejala de Economía y Hacienda, Silvia González, anunció las modificaciones que se van a ejecutar en algunas de las ordenanzas municipales derivadas todas ellas de “temas normativos o ajustes conceptuales que poco afectan a los contenidos y si lo hacen, es de forma positiva. Estamos hablando de ajustes como cambiar el concepto de matrimonio por el de unidad familiar, e incluir otros como el de familia monoparental”.
En cuanto a las bonificaciones y exenciones a empresas, comercios y establecimientos locales que se fijaron con motivo de la pandemia, Santa Marta ha sido uno de los municipios que más los ha prorrogado, manteniendo estas ventajas económicas durante años, aunque ahora sea necesario volver a la normalidad.
“Llevamos 11 años asumiendo gastos para que el dinero siga estando en manos de los ciudadanos. Una voluntad política que se vuelve crucial en un momento como este en el que los niveles de inflación son inasumibles para muchas familias”, explicó la responsable del área, algo que secundó el alcalde al asegurar que “sigue siendo un compromiso para nosotros no repercutir en los vecinos esta subida generalizada de precios, de los productos básicos, de la energía para no gravar más su economía”.