La Guardia Civil de Soria investiga desde el pasado día 6 de marzo a una mujer de 60 años de edad como presunta autora de un supuesto delito de apropiación indebida de 10.000 euros.
Según la investigación, la mujer se quedó con la tarjeta de débito de una persona fallecida con la que convivía y sacó dinero en varios cajeros por los importes máximos permitidos hasta alcanzar los 10.000 euros. De todo ello ha quedado constancia en las videograbaciones de seguridad solicitadas a las entidades.
Fue un hermano del fallecido el que denunció ante la Guardia Civil, ya que al tramitar la herencia y revisar los extractos de la cuenta corriente constató que se había sacado dinero en efectivo con posterioridad a la fecha de su fallecimiento.
Las diligencias instruidas fueron remitidas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Almazán.