Una macroperación acaba con una banda criminal que sembró el caos en seis provincias, una de ellas en CyL
Guardia Civil y Policía Nacional ha esclarecido hasta 27 robos cometidos por gran parte de la península
23 marzo, 2023 10:40La Guardia Civil y la Policía Nacional han acabado desarticulando una banda criminal que se ha dedicado al robo de establecimientos públicos hostelería, joyería o telefonía móvil repartidos por hasta seis provincias de España, entre las que se encontraba una de Castilla y León.
Con esta macroperación conjunta se ha logrado esclarecer hasta 27 robos llevados a cabo en Soria, Zaragoza, Teruel, Huesca, La Rioja y Guadalajara. El grupo criminal estaba muy activo, llegando a actuar casi a diario. La investigación comenzó a comienzos de febrero, cuando se cometieron dos robos en una joyería y un bar de la localidad de Borja, en Zaragoza, en una misma noche.
Fue entonces cuando se activó al Equipo de la Policía Judicial de la Guardia Civil de La Almunia, que lograron esclarecer que los ilícitos habían sido cometidos por los mismos criminales. Además, al día siguiente de los hechos, los agentes encontraron en las inmediaciones del municipio efectos procedentes del robo de la joyería y las prendas llevadas por los asaltantes que fueron de relevancia para lograr su identidad.
A la par del transcurso de la investigación, se produjeron distintos robos en establecimientos públicos, situados en distintas provincias que afectaban tanto a la demarcación de la Policía Nacional como de la Guardia Civil, siendo estos forma consecutiva casi a diario, con un mismo modus operandi y perpetrados por los mismos delincuentes.
Esto motivó el inicio de la macroperación conjunta entre del Grupo Operativo Local de Policía Nacional de Calatayud y el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de La Almunia de Doña Godina, cuyas pesquisas se centraron en los mismos sospechosos de haber cometido los asaltos.
La colaboración ayudó a lograr la identidad de los supuestos autores de los robos, que serían un grupo de jóvenes asentados en Zaragoza capital y que, de manera coordinada y distribuyendo las funciones, concertarían la logística y lugares para cometer los delitos.
La fase de explotación del dispositivo policial fue durante la mañana del 16 de marzo, cuando los agentes de los dos cuerpos llevaron a cabo hasta seis detenciones en distintos lugares de la capital aragonesa. Los detenidos, todos varones y con antecedentes policiales, fueron acusados de hasta 27 presuntos delitos de robo con fuerza en las cosas, blanqueo de capitales y pertenencia a un grupo criminal. Finalmente, una vez en disposición judicial tres de ellos entraron en prisión en el centro penitenciario de Zuera.
Modus operandi de la banda criminal
El grupo de delincuentes estaba coordinado y se repartía las funciones para perpetrar los ilícitos con el objetivo de aglutinar dinero en efectivo u objetos que después usaban para su uso propio. Uno de los miembros hacía las funciones de líder, que a su vez coordinada los robos y su manera de proceder, además de tener una persona de confianza que se encargaba de guardar el dinero obtenido y después distribuirlo al resto de integrantes.
Igualmente, esta segunda persona también era el encargado de trasladar a los asaltantes en el vehículo y desempeñaba funciones de vigilancia en los exteriores de los establecimientos.
Los delitos siempre se llevaban a cabo cuando los establecimientos estaban cerrados, por la noche y en el los que tenían controlados los sistemas de videovigilancia. Para entrar a los sitios hacían un apalancamiento de puertas y fractura de ventanas y accesos, usando herramientas que habían comprado momentos antes en otros locales comerciales. Ocultaban sus rostros para evitar ser identificados y, en gran parte de los casos, entraban agazapados para evitar ser captados por las cámaras de seguridad.
Tras obtener el botín, en la mayoría de los casos dinero en efectivo en monedas, ya que su principal objetivo eran las máquinas de ocio de los establecimientos. Seguidamente, cambiaban las monedas a billetes en locales de la capital que tienen este tipo de máquinas. Esto lo hacían horas después de los robos y les permitía blanquear el dinero recaudado para repartirlo entre el resto de los miembros.
La investigación continúa abierta debido a que el operativo policial todavía no descarta más detenciones.