El alcalde de Ágreda, Jesús Manuel Alonso, durante una visita del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, a la localidad soriana.

El alcalde de Ágreda, Jesús Manuel Alonso, durante una visita del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, a la localidad soriana. Concha Ortega ICAL

Soria

El alcalde socialista de Ágreda que se opone a la amnistía: "El PSOE se está extremando y radicalizando"

Jesús Manuel Alonso asegura, en una entrevista a EL ESPAÑOL de Castilla y León, que si fuera diputado y tuviera que votar la investidura de Sánchez pondría su cargo "a disposición del partido"

11 noviembre, 2023 07:00

Noticias relacionadas

El acuerdo entre el PSOE y los independentistas catalanes para la investidura de Pedro Sánchez, que tendrá lugar los próximos 15 y 16 de noviembre, ha levantado la polémica ante unas cesiones que la oposición considera que quiebran la igualdad entre los ciudadanos y los territorios. La amnistía a los encausados por los hechos de octubre de 2017 y la condonación de 15.000 millones de euros de deuda a Cataluña han llevado a la convocatoria de manifestaciones y protestas durante las últimas semanas, pero PP y Vox no han sido los únicos en alzar la voz.

Además de históricos socialistas como Felipe González o Alfonso Guerra, dirigentes actuales del PSOE han mostrado su oposición o sus dudas ante estas medidas y algunos de los más reseñables pertenecen al partido en Castilla y León. La alcaldesa de Palencia, Miriam Andrés, reconoció que no estaba de acuerdo con la amnistía y especialmente combativo con esta cuestión ha sido Jesús Manuel Alonso, alcalde socialista del municipio soriano de Ágreda desde el año 2007.

Alonso ha atendido a EL ESPAÑOL de Castilla y León y ha exigido que la amnistía se someta "a la decisión de los ciudadanos", asegurando que la condonación de la deuda solo a Cataluña "quiebra el principio de solidaridad". El regidor de esta localidad soriana, que ha pedido la convocatoria de elecciones, ha reconocido que pondría su cargo a disposición del partido si tuviera que votar la investidura de Pedro Sánchez en base a esos acuerdos y ha criticado que su lamentado que su formación se esté "radicalizando y extremando".

Pregunta.- Se ha mostrado firmemente contrario a la amnistía acordada entre el PSOE y los independentistas catalanes y votó en contra en la consulta del partido, ¿por qué?

Respuesta.- La amnistía es una cuestión tan radicalmente excepcional que entiendo que se tiene que someter a la decisión de los ciudadanos. Es un tema de honestidad política. La amnistía no se ha propuesto en el programa electoral y hemos escuchado manifestaciones contrarias a la amnistía por parte de dirigentes socialistas por activa y por pasiva.

"Lo más honesto es someter la amnistía a referéndum"

No se puede tomar una decisión abiertamente contraria a lo que se ha dicho, debe haber una lealtad a la palabra dada. Ha habido un cierto fraude electoral, diciendo una cosa para luego hacer la contraria. Además, es una imposición de una persona que es un delincuente para un beneficio personal propio de personas que han atentado contra la seguridad ciudadana e incluso contra la integridad física de las personas. Por eso creo que lo más honesto es someterla a referéndum.

P.- En lo relativo a la prometida condonación de 15.000 millones de euros de deuda a Cataluña, ¿cree que supone un agravio a Castilla y León?

R.- Esa medida coloca al Gobierno en una posición de debilidad desde el punto de vista de la aminoración de sus ingresos y minimiza la capacidad de inversión. En Ágreda carecemos de muchas cuestiones estratégicas como autopistas, autovías o conexión ferroviaria, tenemos un sistema sanitario que no es el mejor, la España despoblada necesita una actuación urgente e inmediata y eso se hace con inversión, y esa condonación de deuda a Cataluña va a minimizar la capacidad de inversión del Gobierno.

"La condonación de deuda a Cataluña quiebra el principio de solidaridad"

Si Cataluña ha pedido que se le condone la deuda es para obtener un beneficio directo y se actúa en contra de un criterio socialista de igualdad y de justicia redistributiva, de la ayuda del rico al pobre cuando este lo necesita. Esto quebraría el principio de solidaridad interterritorial porque una comunidad rica va a dejar de aportar al Gobierno central, que es el que debe repartir entre las comunidades más pobres. Esa solidaridad quiebra porque reduce la capacidad inversora en las zonas que más lo necesitan.

P.- ¿Ha recibido algún toque de atención por parte de la dirección nacional, autonómica o provincial del PSOE por hacer públicas estas opiniones?

R.- Nadie me ha dicho absolutamente nada. He tenido algún cambio de impresiones a nivel provincial, con respeto absoluto a mi libertad de expresión, y a nivel nacional nadie me ha dicho absolutamente nada.

P.- Si fuese diputado nacional del PSOE y tuviera que apoyar la investidura de Sánchez en base a estos acuerdos, ¿se plantearía votar en contra de su propio candidato?

R.- Ningún político puede estar por encima de sus votantes, que son los que le han colocado en un cargo institucional. En este momento, ante el error estratégico en el que va a incurrir el PSOE, si fuera diputado yo lo que haría es poner mi cargo a disposición del partido. 

He visto que mi opinión tiene una conexión absoluta con lo que la sociedad dice. Mi opinión no es coincidente con el 87% de los militantes pero quien pone y quita gobiernos es el pueblo español y hay mucha gente sencilla que se ha dirigido a mí y me ha apoyado. Yo fuí senador gracias al apoyo mayoritario que tuve de la gente.

"Si fuera diputado, pondría mi cargo a disposición del partido"

P.- ¿Cuál cree que sería el pacto más adecuado que debería buscar el PSOE, teniendo en cuenta la aritmética parlamentaria actual?

R.- Yo siempre he sido partidario de que se deje gobernar a quien ha tenido más respaldo social y más respaldo de los votantes. Se debería permitir a quien lograse la investidura gobernar en minoría y que luego ese gobierno hiciese propuestas que fueran interesantes para el país y que pudieran apoyar todos. El mínimo común denominador debe ser la búsqueda del interés general. 

Lo que habría que hacer es, en temas estratégicos, llegar a acuerdos de Estado. Por ejemplo, en el caso de la España despoblada, que es una cuestión de interés para el país. En cuestiones estratégicas todo el mundo debería actuar al unísono y mirar que es lo que le interesa a España, porque lo que vaya en beneficio de España repercutirá también en el beneficio de todos. Pero para eso hacen falta políticos con una visión de unidad y no excluyente. 

"Siempre he sido partidario de que se deje gobernar a quien ha tenido más respaldo"

Gobernar a costa de lo que sea no es correcto, hay que permitir gobiernos que sean capaces de mantener la igualdad de todos los españoles con independencia de donde decidan vivir.

P.- Por ahora no han sido muchos cargos públicos socialistas los que han mostrado su rechazo público a esta medida, ¿cree que hay otros dirigentes que pueden ser contrarios a estas cesiones y no lo dicen por miedo?

R.- Yo hablo con mucha gente que me dice: "que razón tienes", por lo que deduzco que mucha gente tiene su opinión propia pero que existe un cierto respeto a lo que viene desde la cúpula. 

P.- ¿Considera acertada la decisión del Gobierno de la Junta de llevar a los tribunales estas medidas si finalmente se aprueban?

R.- Desconozco los términos exactos del acuerdo y no sé si va a ser injusto para Castilla y León, aunque considero que es injusto para el interés general, pero si ese acuerdo fuese injusto para Castilla y León vería absolutamente razonable que se recurriese.

"Si el acuerdo fuese injusto para Castilla y León, vería absolutamente razonable que se recurriese"

P.- Si finalmente hubiese elecciones por no salir adelante la investidura y el PSOE acudiese a ellas con la defensa de la amnistía por bandera, ¿pediría el voto para otro partido?

R.- Yo entré al PSOE cuando el secreario general era Felipe González, que creo que fue un gran político para nuestro país y que tuvo la virtud de lograr un PSOE centrado. Era un PSOE que tenía un gran espectro social, desde la izquierda al centro, y en este momento el partido está más radicalizado, por lo que las personas de centro no se sienten representadas.

Mi posición es la que tenían grandes políticos como Felipe González o José Bono, o la que tiene ahora mi amigo Emiliano García-Page, que tienen una visión de más espectro social. Yo entendía que este partido era el que más garantizaba los pilares más esenciales del Estado social y democrático de derecho, como la sanidad pública gratuita, la educación, el que defendía más a la gente de abajo. Yo en este momento lo que voy a intentar, aunque sea una tarea un poco difícil, es que desde mi partido las cosas cambien.

"El PSOE se está extremando y radicalizando"

P.- Si la investidura sale adelante, como parece que ocurrirá, en base a estos acuerdos y se termina aprobando la Ley de Amnistía y esa condonación de deuda a Cataluña, ¿se plantearía darse de baja del PSOE?

R.- Yo entré al PSOE por convicciones, porque vi una evolución muy importante en nuestro país con Felipe González, y sigo pensando que hace falta un partido que sea capaz de garantizar a una gran capa social la posibilidad de que siendo humilde pueda crecer con su esfuerzo, su trabajo y su sacrificio.

Ahora el PSOE se está extremando y radicalizando porque cuando te aproximas a un extremo dejas de estar en el equilibrio. Ha habido medidas que, al juntarnos con partidos extremistas como Podemos o los independentistas, que permanentemente están buscando su beneficio personal, no han sido lo que necesita este país.

Me gustaría que esto fuese algo transitorio y cuando una cosa está mal hay que intentar cambiarla y si a pesar de eso se ve que las cosas son imposibles de cambiar, habría que ver las alternativas. Yo creo que todos los que nos dedicamos a la política tenemos que estar, ante todo, al servicio del país.