La gastronomía se ha convertido en uno de los motores del turismo nacional e internacional. Cada vez son más las personas que viajan con el objetivo de disfrutar de la buena cocina a través de platos que, por lo general, no están acostumbrados a degustar. 

Cada ciudad tiene su plato típico y, aunque muchos sí han conseguido formar parte de la dieta de habitantes de diferentes puntos de España, como la paella valenciana o la fabada asturiana, otros tantos suelen degustarse únicamente en su lugar de origen. Generalmente, porque solo allí se encuentran los ingredientes estrella. 

Ejemplo de ello son las migas del pastor sorianas. Es cierto que este plato se puede encontrar en numerosos rincones del país como Andalucía o Aragón, pero hace tiempo que la provincia de Soria quiso darle su toque especial, logrando una variante única que se ha convertido en uno de sus platos más representativos.

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La receta original está elaborada a base de trozos de miga de pan tostado, chorizo, ajo, pimentón, sal, agua, aceite y, en algunos casos, panceta y huevos.

Pero la de Soria, por su parte, cuenta con dos ingredientes clave que la diferencian de la común: el torrezno, la seña de identidad gastronómica de la provincia, y la uva, el gran toque de esta receta. 

Quien la prueba, repite, está deliciosa y lo mejor de todo es que es una elaboración muy económica y fácil de preparar. 

Denominación

Las migas del pastor deben su nombre a los pastores, dado que este, precisamente, era uno de los platos más habituales de la gente que se dedicaba a la trashumancia.Y es que con ella aprovechaban el pan que ya se había quedado seco.

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La receta soriana

Lo más probable es que a todo el que haya llegado hasta aquí le hayan entrado unas ganas incontrolables de probar este manjar culinario. Por eso, EL ESPAÑOL - Noticias de Castilla y León te explica cómo prepararlo.

Para preparar la auténtica receta soriana para cuatro personas se necesitarán 300 gramos de pan de hogaza del día anterior desmigado, tres dientes de ajo picado, cuatro cucharadas de aceite de oliva, 1/2 cucharada de pimentón dulce, ocho torreznos, un vaso de agua, una cucharadita de sal y unos 300 gramos de uvas.

El primer paso será calentar el aceite y freír el ajo junto a los torreznos durante aproximadamente cinco minutos. Tras ello, habrá que escurrir el aceite con la ayuda de una espumadera, añadir el pimentón y rehogarlo. 

Lo siguiente será añadir el pan desmigado y el agua y removerlo todo bien para que se mezclen e impregnen todos los sabores mientras se va evaporando el agua. 

Entonces, tan solo quedará añadirle la sal y, como paso final, incorporar las uvas, lavadas y salteadas. Y 'voilá', la receta estaría lista en cuatro sencillos pasos. 

Aunque las migas del pastor se pueden hacer en casa y de forma rápida, otra muy buena opción es ir a los bares y restaurantes de la ciudad a degustarla. Porque sí, la gran mayoría las tiene en su carta.