Mi amigo Jorge Castro “Luguillano”, taurino vallisoletano de toda la vida, me invitó a visitar un complejo ecuestre del que yo tenía alguna referencia, pero no conocía ni la zona donde se ubica ni lo que allí podría encontrarme. Sorpresa!!

Y resulta que la finca dista unos 15 kilómetros de Pucela, entre Mojados y Tudela de Duero. Y resulta que jamás pensé que podría encontrarme, de entrada y de sopetón, con ingente cantidad de ocas y gansos que ruidosamente nos recibieron con su graznido habitual. Estaban por allí, por el camino de entrada, y por toda la finca ya que son del orden de unos mil quinientos ejemplares.

Todo tenía su explicación y es que en este lugar, al margen de los caballos que hay para la doma, equitación y espectáculo, se utilizan animales exóticos para exhibiciones en los mercados medievales, cabalgatas de reyes magos, eventos publicitarios, etc.

En la oficina nos atendió Anadelia y enseguida llegaron sus tres hermanos: Marco, Javier y Casiano que, con decisión, uno de ellos, cogió a las boas y las soltó por el suelo para, después, enroscarse una de ellas a su cuello como si tal cosa. Luego llegaría el patriarca de la familia, Javier García que, tras saludarnos, cogió con precaución a la pitón para enroscarla en su brazo, pero bien agarrada la cabeza. Y a todo esto un servidor grabando cámara en ristre…

Luego llegó Concha, la matriarca, que en otro alarde hizo volar a uno de los guacamayos hasta su hombro para darle una chuche. En fin, les detallo todo esto para presentarles a una familia que vive por y para los animales.

Ellos se dedican en cuerpo y alma, junto a una decena de trabajadores, a mantener estas instalaciones y a sus almas que son las mil quinientas ocas y gansos; ochenta camellos y dromedarios, llamas, pavos, gallinas, conejos, burros, ponys, mapaches, avestruces y lo fundamental: caballos y yeguas en abundante número que utilizan para los principios de este negocio que es la doma, la equitación, el pupilaje y todo lo que conlleva el mundo del equino.

Y el alma mater de todo este tinglado es Javier García Álvarez, que hace la séptima generación de carniceros y tratantes vallisoletanos. Javier es un tipo abierto, despierto, hábil negociador como buen tratante de caballos, y trabajador incansable. A sus 52 años, cuatro hijos y cinco nietos, no tiene empacho en decir que morirá con las botas puestas. Su móvil no para ni un minuto y su verbo fácil le permite comprar o vender un caballo en un santiamén o contratar sus múltiples espectáculos en su trato con los consistorios y plazas de toros.

Como el hombre que sabía demasiado, nos ha prometido hablar claro y alto sobre el asunto de los extinguidos caballos de la Policía Municipal de Valladolid donde, al parecer, hay mucha tela que cortar. La familia dispone de otros cinco negocios relacionados con el campo y los animales y ahora están en plena remodelación de una finca cercana a El Centauro, con licencia de parque zoológico, para crear un centro de interpretación de la naturaleza. Prometo llevar a mis nietas Lola y Olivia, y a Nico, que lo pasarán en grande.

De momento allí están ubicadas algunas especies de rapaces: águilas reales, búhos, milanos, etc. Y es que Javier no para.

Todo un mundo animal el que ha creado este empresario aventurero e innovador con el que pasamos un delicioso día junto a nuestro amigo Jorge Castro “Luguillano”, amigo y colaborador de esta familia. El remate, como viene siendo habitual en mis reportajes, acabó con sensacionales viandas en uno de los mejores restaurantes de la provincia: El 2,39. Ubicado en Tudela de Duero, y regentado por Angelines en la cocina y Santi en la sala, fue estrella Michelin y de ellos dicen:

“Restaurante de ambiente familiar y estilo castellano escondido tras una fachada en piedra. Desde los fogones proponen una cocina tradicional que ensalza los productos de la tierra, siempre bien tratados y en un permanente idilio con las verduras de temporada”.

Nosotros damos fe a través de las fotografías que fuimos realizando y que ilustran este reportaje. Otro reportaje, basado en el espectáculo UNICO, saldrá en los próximos días en el programa taurino Grana y Oro de RTVCYL.

Y tras el buen yantar, acompañados de un gran MAURO, se unió a nosotros un taurino tudelano como Angelito “El pecas” para el consabido mus. “El pecas y un servidor dimos buena cuenta de Javier y Jorge. El mus tiene estas cosas…