Pablo Magdaleno medina rioseco 1

Pablo Magdaleno medina rioseco 1

Valladolid

Rioseco homenajea a Pablo Magdaleno en el centenario de su nacimiento

29 junio, 2017 18:20

Medina de Rioseco homenajea este viernes, 30 de junio, a las 20.30 horas, en el Teatro Principal al músico y compositor Pablo Magdaleno con motivo del centenario de su nacimiento. Sus nietos Diego, Pablo y Álvaro Fernández Magdaleno y David Magdaleno Gómez, y sus bisnietos Diego Fernández Alfageme y Pablo Fernández Entrena ofrecerán un concierto en su memoria en el que no faltarán piezas compuestas por Pablo Magdaleno.

El Ayuntamiento riosecano y la familia del músico y compositor organizan el acto, que contará con las intervenciones de su nieto Diego Fernández Magdaleno, del exalcalde riosecano Manuel Fuentes y del actual alcalde, David Esteban.

Pablo Magdaleno, que nació en Median de Rioseco un 30 de junio de 1917, no es de extrañar que dedicara su vida a la música si se sabe que desde su infancia vivió entre partituras e instrumentos en la casa familiar de la calle del Pescado. Su padre, Toribio, organista en la iglesia de Santa María, profesor de música y director de la banda municipal, enseñó música a muchos riosecanos, incluidos sus hijos Pablo, Columbiano y Eustasio. Columbiano, que tocaba el violín y el piano, llegó a ser director de la banda municipal de Peñafiel, donde sigue siendo recordado. Eustasio tocaba la flauta.

Aunque Pablo sabía tocar todos los instrumentos de la banda, en especial dominaba el saxofón y el piano. Fue durante muchos años director de la banda municipal de Medina de Rioseco, enseñando solfeo e instrumentos a muchos vecinos. Su vida era la música, porque la música estaba muy presente en la vida, en especial en las fiestas de San Juan, con dianas floreadas, pasacalles, conciertos, sesiones de bailables (así aparece en los programas) y verbenas. Además de con la banda, que amenizaba todos los acontecimientos y fiestas, Pablo tocaba el piano en las sesiones de cine mudo, en bailes o acompañando a alguna compañía de zarzuela que llegaba a la ciudad.

Cofrade del Cristo de la Paz, Pablo Magdaleno compuso marchas para todas las cofradías riosecanas, que sonaban a la salida de sus pasos o durante la procesión, pero también para la Virgen de Castilviejo, San Roque o Santa Cecilia, además de un buen número de pasodobles, alguno dedicado a los diestros Paquirri, Gúmer Galván o Bernardino Cabañas. Junto a esta música funcional, que llegaba de los quehaceres de su profesión, estaba otra que componía con mayor libertad estética, según explica su nieto el pianista Diego Fernández Magdaleno. De esta manera compuso una “Plegaría”, obra para piano, que el compositor Francisco García Álvarez ha calificado de excelente.