Toma la Palabra ha presentado este miércoles sus enmiendas al Presupuesto de la Diputación de Valladolid, un total de 28 millones de euros en diferentes medidas y propuestas con el objetivo principal de frenar la despoblación, tal y como ha argumentado el portavoz de la formación, Salvador Arpa.

El principal proyecto planteado por Toma la Palabra es una aportación de 18,4 millones encuadrada dentro del “apoyo incondicional a los ayuntamientos”. Arpa ha argumentado que “a través de la ampliación de la ayuda a los Ayuntamientos y el no condicionamiento de esas ayudas, al menos doblamos el dinero que recibirán directamente los Ayuntamientos y les permitimos que sean ellos mismos quienes decidan la prioridad de las necesidades de sus municipios”.

Según Toma la Palabra, esta partida implicará, necesariamente, la generación de empleo en los municipios puesto que los ayuntamientos se verán obligados a la contratación de distintas empresas o servicios que lleven a cabo sus planes. “Los planes de turismo estarían incluidos en esta partida puesto que entendemos que tan legítimo es buscar el desarrollo de un pueblo a través del turismo como en el arreglo de una calle, en función de las circunstancias de cada municipio. Y el hecho de que un pueblo no cuente con un recurso turístico no debería privarle del acceso a determinadas ayudas que bien pueden ser motor de desarrollo del municipio por otras vías”, añaden.

Empleo rural

Otra de las propuestas principales en las enmiendas es la creación de un Plan de Empleo de más de 7 millones para que los Ayuntamientos puedan contratar a las personas que requieran en un puesto no condicionado. De la misma forma que en la enmienda anterior, los Ayuntamientos podrán decidir si necesitan un alguacil, una persona para atender una oficina de turismo, monitores o una persona que atienda el teleclub, por poner algunos ejemplos. Nadie mejor que los Ayuntamientos para definir sus necesidades y generar empleo en su territorio. De esta manera se genera empleo directo y no se entrega el dinero a asociaciones de empresarios o a empresas particulares cuyos resultados desconocemos, y se garantiza la cobertura de servicios básicos por parte de los Ayuntamientos.

Vivienda

El acceso a la vivienda es uno de los mayores problemas a los que se enfrenta el medio rural: escasez de mercado de venta o alquiler, precios altísimos para la mayor parte de la población y crecimiento constante de viviendas en ruinas que, además, degradan nuestros pueblos.

“Por eso creemos que es fundamental aumentar la dotación de vivienda: no para que haya más ayudas de poquito dinero, sino para que realmente las ayudas dejen de ser parches o propinas y se conviertan en verdaderos incentivos frente a la vivienda en el mundo urbano”, añade Arpa.