Homenaje a Ingmar Bergman en el Museo Patio Herreriano

El Museo Patio Herreriano de Valladolid rinde homenaje este mes de diciembre a uno de los grandes maestros del cine europeo, Ingmar Bergman, uno de los iconos de la Semana Internacional de Cine de Valladolid. Así, el espacio museístico vallisoletano despide el año en que se conmemora el décimo aniversario del fallecimiento del director sueco.

Será los días 11, 12, 13 y 14 de diciembre con un ciclo que llevará por subtítulo La trilogía del silencio. La entrada a las proyecciones, que darán comienzo a las 19.00 horas, será gratuita hasta completar aforo y las películas se verán en versión original con subtítulos.

El ciclo incluye dos documentales en torno a la figura del cineasta, que abrirán el lunes 11 la propuesta: Bergman y el cine (2004) y La isla de Bergman (2006), firmados ambos por la periodista sueca Marie Nyreröd, que elaboró una trilogía documental para la televisión de su país que aborda las relaciones del director con el cine y el teatro y su vida privada en Faro, la isla del Báltico en la que pasó los últimos años de su vida.

El martes 2 podrá verse el primero de los filmes que Bergman dedicó al silencio, Como un espejo (Såsom i en spegel), de 1961. La película, con la que consiguió el Oscar a la Mejor Película Extranjera, narra la historia de una joven esquizofrénica que vive en una isla remota y que sufre alucinaciones que le hacen encontrarse con Dios, quien se le aparece con la forma de una araña monstruosa.

‘Los comulgantes’, de Ingmar Bergman

El miércoles 13 se proyectará Los comulgantes (Nattvardsgästerna), de 1963, que fue estrenada en la Seminci en 1966, durante la primera etapa del Festival, cuando aún se denominaba Semana de Cine Religioso y Valores Humanos, un filme que retrata con dureza su vida personal y su propia visión del mundo. Esta película, una de sus obras más íntimas y autobiográficas, le valió a Bergman uno de los tres Lábanos de Oro (así se denominaba entonces el máximo galardón de la cita cinematográfica) que consiguió a lo largo de su carrera y que le convierten en uno de los cineastas más laureados de la Seminci. El primero de ellos lo recibió en 1960 por El séptimo sello. El segundo le llegó tan sólo un año después por El manantial de la doncella.

El jueves 14, cerrará el ciclo en el Herreriano El silencio (Tystnaden), filme de 1963 protagonizado por dos hermanas, Ester y Anna, entre las que la incomunicación es total. Su relación es una extraña mezcla de odio y dependencia, de la que es testigo mudo el hijo de Anna, Johan, y que alcanza su límite en una complicada noche en que se ven obligados a alojarse en un apartado hotel en mitad del viaje de vuelta de sus vacaciones.