Las Fiestas de Montemayor de Pililla tienen este año un significado aún más especial para los vecinos del municipio, ya que estrenan el reconocimiento como Bien de Interés Cultural (BIC) de carácter inmaterial para la Función de la Cruz y la plaza de toros de la Empalizada, uno de los símbolos de la localidad.

El alcalde de Montemayor, Iván Velasco, lo ha destacado en su intervención para presentar al pregonero de este año, Juan Carlos Sanz. “Estas son las primeras Fiestas que celebramos tras el reconocimiento que tanto merecíamos”, ha asegurado Velasco, que ha animado a los vecinos a disfrutar “de unas Fiestas que son las de todos”.

“Es tiempo de toros y orquestas, de bailes de madrugada y vermut entre amigos, días de desconexión para divertirse con respeto y tolerancia hacia los demás, para que sigamos siendo el pueblo ejemplar que siempre somos”, ha destacado el alcalde de Montemayor.

Sanz ha animado a los vecinos a sentirse orgullosos de sus raíces y a “mantener las costumbres y tradiciones para que niños y jóvenes se sientan partícipes de la historia de su pueblo”.

Tras el pregón, al que han asistido varios alcaldes de la provincia y diputados provinciales, cientos de personas han guardado una respetuosa cola ante el Ayuntamiento para recoger las pulseras conmemorativas que el Consistorio ha repartido para dejar constancia del reconocimiento a la Empalizada como símbolo del atractivo cultural y turístico de Montemayor.

Con las muñecas decoradas, se ha formado una gran comitiva para participar en el tradicional desfile infantil de disfraces, animado por la Charanga Botarate y en el que no han faltado princesas y piratas, superhéroes, animales ni vaqueros. Por delante, todo un fin de semana cargado de actividades con una completa programación.