Juicio contra dos hermanos por intento de asesinato en Medina
Fiscalía de Valladolid solicita penas de nueve años de cárcel para los hermanos Juan Manuel y Ricardo B.G. por tentativa de asesinato registrada el pasado día 5 de septiembre de 2013 en Medina del Campo, cuando ambos, en compañía de su padre, en paradero desconocido, acudieron a casa de otro vecino, con cuyo hijo los jóvenes acababan de mantener una disputa, y efectuaron contra él sendos disparos que le dejaron gravemente herido.
El juicio está previsto para este lunes y martes, días 3 y 4 de diciembre, respectivamente, en la Audiencia de Valladolid, donde, con carácter provisional, la acusación pública interesa condenas de ocho años de cárcel para los dos hermanos por tentativa de asesinato y otro año más para cada uno por tenencia ilícita de armas, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.
Además de las medidas de prohibición de aproximarse a la víctima, su domicilio y lugar de trabajo en un radio de 500 metros, así como de comunicarse con ella por espacio de diez años, el acusador público solicita el pago de indemnizaciones en favor del lesionado, Diego F, que se elevan a un total de 526.535 euros, que incluyen la estancia hospitalaria, los días impeditivos, las secuelas y la incapacidad permanente absoluta del perjudicado, así como de otros 5.500 euros al Sacyl por los gastos de asistencia del herido.
Los hechos por los que serán juzgados los hermanos Juan Manuel y Ricardo B.G, en ausencia del principal implicado y padre de ambos, Francisco, se produjeron en fiestas de Medina la madrugada del 5 de septiembre de 2013, cuando los dos primeros se vieron implicados en una refriega con otros jóvenes, todos ellos de etnia gitana, pertenecientes a dos familias residentes en dicha localidad.
Discutieron en la zona del Recinto Ferial. Posteriormente, los dos acusados se dirigieron al domicilio de su progenitor para darle cuenta de la afrenta sufrida y entonces los tres, de común acuerdo, se armaron con una escopeta del calibre 16 y de dos navajas de grandes dimensiones antes de presentarse en la casa del padre del joven con el que acababan de tener la discusión.
Una vez allí, según el relato el fiscal, los acusados llamaron a la puerta de la vivienda de la otra familia y la conminaron a dar la cara al grito de "¡salir hijos de puta, cabrones, salir si tenéis cojones!", momento en el que se abrió la puerta y apareció la víctima.
Fue entonces cuando el padre de los acusados, Francisco B, efectuó un primer disparo al aire y a continuación, sin solución de continuidad, un segundo a una distancia de unos seis metros y medio que alcanzó de lleno a Diego F. en la cara--sufrió el estallido del globo ocular--y el hemitórax.
Acto seguido, los agresores salieron huyendo y ocultaron la escopeta, sin que la misma haya sido recuperada hasta la fecha, como tampoco ha sido localizado el autor material de los disparos, en busca y captura desde el día de los hechos.