cajero automatico 1

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Valladolid

Empleaban una curiosa artimaña para duplicar tarjetas en cajeros de un municipio de la provincia de Valladolid

22 septiembre, 2019 15:02

Fiscalía de Valladolid solicita penas de siete años de prisión para dos varones, Anatoli K.A. y Venelin R.V, procedentes de un país del Este de Europa, acusados de haber instalado en 2017 dispositivos denominados 'skimmers' en un cajero automático de Medina de Rioseco con el fin de obtener el duplicado de tarjetas de crédito de los usuarios que luego, presuntamente, utilizaron en otros de Salamanca, Madrid y Toledo para realizar extracciones por importe global de 3.500 euros.

El juicio está fijado para este lunes y el martes, días 23 y 24 de septiembre, respectivamente, en la Sección Segunda de la Audiencia de Valladolid, donde el Ministerio Fiscal acude inicialmente con una petición de siete años de prisión para cada uno de los procesados como autores de un delito continuado de estafa, en concurso ideal con otro de falsificación de tarjeta de crédito, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.

En concepto de responsabilidad civil, la acusación pública interesa que ambos, de forma conjunta y solidaria, indemnicen al Banco Popular y al Banco de Santander con 2.700 y 800 euros, respectivamente, ya que la decena de titulares de las tarjetas 'clonadas' no reclama cantidad alguna al haberse hecho cargo ambas entidades del importe de las extracciones ilegales.

Los hechos objeto de la presente causa tienen su origen en el día 25 de febrero y el 14 de octubre de 2017 cuando los dos acusados, siempre según la tesis del fiscal, instalaron dispositivos de captación de bandas magnéticas y códigos pin ('skimming') de tarjetas bancarias en un cajero automático del Banco Popular situado en la Avenida de Juan Carlos I de Medina de Rioseco, con el propósito luego de clonar las mismas y utilizarlas en beneficio propio.

Por este procedimiento, habrían utilizado los datos obtenidos para realizar distintas extracciones de dinero en dos cajeros distintos del Banco Popular en Salamanca y un tercero en Medina del Campo (Valladolid), entre los días 26 y 27 de febrero de 2017, así como en otros dos del Banco de Santander en Monforte de Lemos (Madrid) y Valmojado (Toledo) el día 16 de octubre del mismo año, en los que en total habrían obtenido un total de 3.500 euros, cantidad que habría sido todavía más elevada de no ser porque muchos de otros intentos resultaron infructuosos.