Se niega en seis ocasiones a la prueba de alcoholemia al grito de "don't blow"

La Policía Municipal de Valladolid ha detenido a un varón de nacionalidad extranjera que presentaba evidentes síntomas de embriaguez y que se negó a someterse a la prueba de alcoholemia, todo ello después de realizar una serie de maniobras peligrosas y advertir de su intención de abandonar el país en los próximos días.

Los hechos acaecieron en la noche del viernes, cuando alrededor de las 21.40 horas una patrulla observó en el entorno de la calle San Lorenzo, en pleno centro de la capital, cómo un vehículo se veía imposibilitado para acceder a un garaje debido a que otro ocupaba el vado.

Al ser invitado por los agentes a desocupar el lugar, el vehículo que ocupaba el vado comenzó a realizar maniobras bruscas y peligrosas que a punto estuvieron, incluso, de hacerle impactar contra los árboles de la calle, por lo que los policías hubieron de solicitar al conductor que detuviera el automóvil.

Sin embargo, según los datos facilitados a Europa Press por fuentes policiales, el conductor hizo caso omiso y siguió maniobrando hasta que los agentes se colocaron frente al coche para obligarlo a detenerse. En ese momento, el conductor descendió del vehículo "dando tumbos, con ojos vidriosos, lenguaje balbuceante y olor a alcohol", síntomas que llevaron a la patrulla a solicitar la presencia de un equipo de atestados que realizara una prueba de alcoholemia.

Una vez personado este equipo, el conductor se negó hasta en seis ocasiones a someterse a la prueba, repitiendo en inglés "don't blow" (no soplo), ante lo que se le advirtió en ese mismo idioma de las consecuencias legales de negarse e incurrir de este modo en un delito de desobediencia.

Su respuesta fue, según las mismas fuentes, juntar sus muñecas en un gesto de invitación a ser esposado, lo que unido a que esta persona no presentaba domicilio en España y había reiterado su intención de abandonar el país en dos días --cosa que le impediría responder ante la Justicia de estos hechos--, llevó a los policías a proceder a su arresto.

Tras informarle en inglés de sus derechos, fue conducido a dependencias policiales, mientras que su vehículo fue retirado al depósito municipal.