Ajetreada y accidentada noche la que han tenido esta madrugada los agentes de la Policía Local de Valladolid en las carreteras de la capital.
Aproximadamente a las 04:15 horas recibían el aviso por la salida de vía de un vehículo. Una vez en el lugar los agentes comprobaron que el coche, un modelo Renault Scénic, se había salido de la vía en el paseo del Hospital Militar, a la altura del cruce con Arco de Ladrillo, había invadido la mediana y había derribado una farola "ocasionando daños de gran consideración tanto en su vehículo como en el mobiliario urbano que obligó a cortar el tráfico", tal y como han señalado desde la Policía Local.
Fue el equipo de atestados el que realizó las pruebas de alcoholemia al conductor arrojando unos resultados de 1,01 y 0,86 cuadruplicando la tasa permitida al volante. "Además, se trataba de un conductor novel que llevaba la L y que ha sido denunciado por un delito contra la seguridad vial y tendrá que hacerse cargo de los daños materiales ocasionados", explican desde la Policía.
Precisamente para retomar la normalidad en la circulación lo antes posible, los bomberos del Ayuntamiento de Valladolid retiraban la farola para que se pudiera restablecer el tráfico cuanto antes, aunque mientras los agentes se encontraban en el lugar observaron al conductor de otro vehículo que conducía de forma errática a las 04:35 horas, "pasaba a cierta velocidad por la zona y casi atropella a alguno de los agentes", explican fuentes policiales.
En ese momento, dan el alto al conductor que fue también sometido a una prueba de alcoholemia por los evidentes síntomas de embriaguez que presentaba el segundo conductor, cuyo resultado fue de 0,79 y 0,77 mg/l, motivo por el cual fue denunciado por delito contra la seguridad vial. Ambos vehículos fueron retirados al depósito municipal.