Estamos en el mes de julio, pero Ana Redondo trabaja sin descanso para conseguir que estas sean una Ferias y Fiestas de la Virgen de San Lorenzo inolvidables. Las mejores de la historia, tras dos años duros de parón por la pandemia del coronavirus. Abre su despacho a EL ESPAÑOL de Castilla y León para hablar sobre ellas y sobre muchas cosas más.

Unas fiestas que aún no tienen pregonero, o pregonera. Lo anunciará el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, entrado el verano. Que contarán con más días de fuegos artificiales, con desfile de peñas y con una gran carpa, al estilo de ‘Pingüinos’, que se ubicará junto a unas Casas Regionales que también volverán a deleitar con sus mejores sabores a todos los que hasta allí se desplacen.

Charlamos con con la concejala de Cultura y Turismo del Ayuntamiento de Valladolid antes de conocer el programa completo de actividades de estas fiestas en la siguiente entrevista:

P.- ¿El foco del Ayuntamiento de Valladolid está centrado ya en la Feria y Fiestas de la Virgen de San Lorenzo que se van a celebrar del 2 al 11 de septiembre?

R.- Así es. Estamos ultimando porque intentamos que este año la programación esté cerrada antes para buzonear los programas. Uno de los problemas que nos encontramos todos los años anteriores a la pandemia, es que el buzoneo se hace muy justo y hay barrios o vecinos a los que no les llega. A pesar de la página web, donde todo el mundo podrá descargarse el programa, pensamos que es tradicional tener el de mano y vamos a intentar comenzar con ese buzoneo el 18 de agosto para que en esas dos semanas llegue y los ciudadanos de Valladolid puedan ver todas las opciones que les ofrecemos. Este año hay muchas ganas, tras dos años y va a haber una programación espléndida.

P.- Como apunta, tras esos dos años sin celebrarse, ¿Desde el Ayuntamiento se quiere que estas sean las mejores fiestas de la historia?

R.- Sí, sin duda. Queremos desquitarnos tras estos dos años. Estamos elaborando una programación muy potente pero no solo en la Plaza Mayor. Es verdad, en cuanto a los conciertos en el corazón de la ciudad, que este año traemos dos conciertos internacionales muy potentes como The Hives y Jason Derulo. Son conciertos que te pueden llegar a costar, en privado, 90 euros y los vamos a tener en abierto para los que nos visiten y, sobre todo, para los ciudadanos de Valladolid. También tenemos bandas míticas como Ska-P. Hay una variedad de estilos y de propuestas muy interesante. Los dos internacionales también van a tirar del turismo, que es importante.

P.- Pero aún no conocemos al pregonero o la pregonera.

R.- Eso es el alcalde. Es exclusivo suyo. Está en ello y se anunciará un poco más entrado el verano. Creo que será un éxito. Hemos intentado, en estas fiestas, que la mayoría de los grupos de la ciudad estén. Si no todos, casi todos.

P.- ¿Puede ir por ahí el tema del pregonero o pregonera? ¿Por los grupos locales?

R.- Puede ir por ahí.

P.- Se ha especulado con que podría ser alguien del Real Valladolid, tras confirmarse su ascenso.

R.- Puede ser. Hay mucho que celebrar este año. El alcalde tiene esa competencia exclusiva y será él el que nos diga quién es el elegido o la elegida. Hay mucho que celebrar este año y es complicado elegir a la persona que va a representar a las fiestas, pero siempre hemos tenido buenos pregoneros: compañías de teatro y mucha gente vinculada a la cultura. Esta es una ciudad cultural, que hace gala de ello, y es un sector que ha estado muy bien representado en los festejos.

P.- No se descarta, por tanto, que pudiera ser alguien del Pucela.

R.- No. Estamos en ello y lo conoceremos a lo largo de este mes.

P.- Hablando del Real Valladolid me ha venido a la cabeza la imagen del nuevo escudo. Óscar Puente no se ha pronunciado sobre él. ¿A Ana Redondo qué le parece?

R.- Creo que hay que tener en cuenta a la afición porque, al final, es la que mantiene durante todo el año, estemos o no en Primera, vivo el espíritu del equipo. Pero yo puedo opinar hasta ahí. Es una decisión privada.

P.- Hablábamos de los conciertos. ¿Qué artista ha costado más traer?

R.- Jason Derulo es el que más ha costado. Todos los conciertos internacionales son más caros. No hay una Plaza Mayor en España con este nivel de conciertos gratuitos. No la hay. Ahora mismo, si Valladolid destaca por algo potente es por la música en vivo y en abierto, en gratuito. Es muy complicado conseguir conciertos gratuitos. No les gusta a algunos grupos. Esa es otra de las dificultades con la que nos encontramos. Es verdad que tras la pandemia parecen más abiertos. Los internacionales, por lo que suponen. Tienen cachés más altos, más los viajes… eso encarece. Se tienen que dar muchos factores: el presupuestario, que encaje con lo que tú quieres para las fiestas, que esté de gira pero que en España no dé más conciertos. Que haga gratuitos o no… Son muchas cosas, pero, en este aspecto, el alcalde interviene mucho y hay que agradecérselo. Sin ese impulso sería complicado. Normalmente, cerramos la programación de conciertos con un año de antelación las fiestas.

Ana Redondo recibe a EL ESPAÑOL de Castilla y León en su despacho

P.- ¿Este año va a haber desfile de peñas?

R.- Sí, va a haber desfile de peñas. Todos los años hablamos con los presidentes de las peñas para que el desfile sea lo más pacífico y altere lo menos posible las buenas costumbres, formas y que haya civismo. La mayoría de los ciudadanos lo respetan, pero hay que hacer esa labor y las peñas lo hacen. Nosotros podemos hacer un llamamiento a ese civismo, pero es cierto que las peñas y sus peñistas, en esa labor de limitar el alcohol en todo el trayecto y ser cívicos a la hora de desarrollar el recorrido, hacen buena labor. Este año insistiremos más que nunca para que se desarrolle con normalidad y no haya incidentes.

P.- ¿El formato es el mismo que años anteriores?

R.- Sí, con un recorrido parecido y la finalización en la Plaza Mayor para el posterior pregón.

P.- ¿Y los fuegos artificiales?

R.- Son muy importantes. Sobre todo, porque se genera un espacio de la ciudad que es muy demandado. Con el terreno para los feriantes, los carruseles y demás y las Casas Regionales. Ahí hay un polo de actividad muy querido, demandado y entendemos que el complemento perfecto son los fuegos artificiales. Las Casas Regionales lo dicen: “Cuando hay fuegos, hay más animación”. La gente acude para hacer el plan completo: lleva a los niños a la feria, cena y ve los fuegos o al revés. Es un plan estupendo para familias y que se disfruta mucho. Hemos pensado que teníamos que reforzar los fuegos y este año vamos a ampliar a ocho días la tirada de los fuegos artificiales.

P.- También los carruseles en el Real de Feria. El año pasado hubo, pero con grandes limitaciones que este año se suprimen.

R.- El año pasado todo estaba muy limitado por el coronavirus. Si nos hemos caracterizado por algo es por mantener las actividades contra viento y marea. Cuando parecía imposible, Valladolid trabajó para sacar adelante lo que pudimos. Se montaron los carruseles, pero la limitación de aforo hizo que fuera a menor escala. Menos carruseles y menos personas. Con todo, fue rentable para tirar hacia delante, pero es evidente que, en esta edición, sin limitaciones, esperamos que sea un gran año para los ciudadanos y para los empresarios del sector que necesitan vivir.

P.- ¿La Feria del Folklore y la Gastronomía vuelve también este año?

R.- Vuelve con una novedad muy destacada que es una carpa a la manera y modo, tras hablarlo con el presidente José Luis Bellido, como la que se monta en Pingüinos. Todo para asegurar que hay una zona para el disfrute sin tener que estar mirando a cómo responde la meteorología. Se va a estar bien en la carpa. Será abierta para que la seguridad por el coronavirus esté garantizada. Va a ser una novedad que hemos conveniado. Firmaremos próximamente y ahí manifestaremos el apoyo a la carpa y a la actividad.

P.- ¿La zona en la que se va a instalar tanto los carruseles como la Feria del Folklore y la Gastronomía va a ser la misma que otros años?

R.- Este año sí. El que viene, a medida que vayan transcurriendo las obras de la Ciudad Deportiva del Real Valladolid, tendremos que ver donde se sitúa. Al parecer, sí que habrá un espacio entre los campos anexos que nos permitiría desarrollar la actividad sin irnos muy lejos. Este año lo podremos celebrar como todos los anteriores.

P.- Se está estudiando, por tanto, una posible nueva ubicación cuando comiencen las obras de la Ciudad Deportiva. Se hablaba del ubicado cerca del Centro Cultural Miguel Delibes. ¿Está descartado?

R.- Hay que hablarlo con los feriantes. No quiero desmantelar un polo de actividad ferial muy interesante donde se dan todos los elementos: fuegos, ferias y gastronomía. Sabiendo que no corre una prisa enorme, porque este año vamos a poder celebrarlo allí, seguiremos trabajando. Este año lo celebraremos donde siempre y cuando finalicen estas fiestas nos sentaremos a hablar con representantes de Casas Regionales y feriantes para ver cómo van evolucionando las obras y tomar decisiones.

P.- ¿Cómo se espera que se desarrolle la Feria de Día?

R.- Hemos tenido varias reuniones con los hosteleros. Aquí, el problema fundamental es el del personal. Ellos nos trasladan que la Feria de Día supone una contratación extra. La gente tiene que estar en las casetas y eso conlleva contratar a personal específico para realizar esta función. Esto puede generar, con el problema de la carencia que tenemos en el sector, algún conflicto. A lo mejor tenemos un número inferior de casetas con respecto a años anteriores, pero ya están las bases lanzadas y las reuniones con el sector son positivas. Calculo que tendremos entre 50 y 80 casetas.

P.- Esto es lo que viene en Valladolid, pero lo que ha habido es mucho ya. El TAC, la Feria del Libro, el World Padel Tour… ¿Qué valoración se hace?

R.- La vuelta a la actividad ordinaria ha sido muy positiva. Hemos detectado que la gente tiene muchas ganas de recuperar la normalidad.  El TAC, que se mantuvo el año pasado, aunque fuera en miniatura, ha resurgido con mucha fuerza. Destacaría, por un lado, la calidad de los espectáculos. Ha habido funciones muy potentes, pero valoraría especialmente la simbiosis que se ha podido apreciar entre la ciudad y los espectáculos. Artistas y compañías han conseguido integrar, como nunca había visto, los edificios y las plazas en sus propuestas artísticas.

Ana Redondo delante del Ayuntamiento de Valladolid

P.- ¿Se va recuperando el número de turistas tras la pandemia?

R.- Este año se dan varias circunstancias complejas que hacen que examinemos los datos y los evaluemos mirando al Plan Estratégico de Turismo. Por un lado, hay una recuperación del turismo que es evidente. Por otro, la gente busca sol y playa tradicional porque no lo ha podido disfrutar esos dos años. Los destinos de interior se resienten un poco porque la gente está en la playa.

También hay que tener en cuenta el aumento de precios que está lastrando a algún destino como puede ser Valladolid. Detectamos también que es Año Santo Compostelano, lo que hace que esas ciudades incrementen su turismo. También se da la circunstancia de que se han cerrado algunos hoteles de Valladolid, que no contábamos con ello como el Hotel Feria o el cambio de titularidad del Meliá Recoletos, La salida de Meliá de Valladolid no es buena noticia.

Al mismo tiempo surgen otros negocios que apuntan a un cambio de modelo en el sector como los pisos y apartamentos turísticos. El INE no computa esta estancia porque no tiene datos sobre ellos y sabemos que están llenos.  

Hay que seguir con esta línea de ofertar actividad y experiencias potentes, tanto las que hemos disfrutado este mes como las que vamos a mantener todo el año, estando muy pendientes de los datos reales que, a veces, no son los oficiales.

Estamos en una situación complicada. No nos interesa lo cuantitativo, sino lo cualitativo. La sostenibilidad pasa por la calidad turística, de la oferta, y en ello trabajamos. La cantidad es importante, pero nosotros no jugamos solo con eso.

P.- ¿Cuál es la situación ante el cierre de hoteles o la falta de profesionales?

R.- No hay unas soluciones fáciles. Creo que hay que dialogar mucho con el sector. Ser conscientes de la posición de cada uno a la hora de encontrar soluciones y buscar propuestas. Hace poco tiempo, con la Cámara de Comercio y la Asociación de Hosteleros, pensamos en la posibilidad de generar formación compartida con compromiso de contratación por parte de los establecimientos que se incorporen al proyecto. Puede ser una fórmula. Todo cumpliendo el horario y con el convenio que, a veces, es un escollo. Lo hemos hablado con sindicatos, con patronal y con el sector. Hay ideas sobre las que trabajar, pero sabemos que no es fácil.

P.- La sostenibilidad es clave en la Estrategia de Turismo de Valladolid. Están los Fondos Next Generation también. ¿Se trabaja para captar cuantías económicas para aplicarlas a esta sostenibilidad?

R.- Tenemos un gran año por delante. Pienso que podemos cosechar esos Fondos Next Generation que tanto necesitamos. Hemos trabajado muy bien para presentar planes muy ambiciosos. Vinculan el turismo gastronómico y el enoturismo con la sostenibilidad, también con el ecoturismo. Ponemos en valor las zonas verdes, las riberas de los ríos que pasan por Valladolid, los parques y jardines, pero también tiramos de patrimonio cultural, de todo lo que implica la cultura gastronómica y del vino a lo largo de la historia. Desde los emplazamientos que vamos a transformar para que el público sea partícipe a todas las rutas del vino, como por ejemplo la de Cigales, que es una de las próximas y más visitadas.

P.- El Ayuntamiento de Valladolid ha pasado a ser socio honorífico de la Ruta de Cigales.

R.- Así es. Hemos trabajado muy bien con el territorio. Con independencia del color político. Hemos encontrado en las rutas del vino unas colaboradoras magníficas y vamos a seguir trabajando en ello.  Esperamos desarrollar Las Catalinas como ese plan enoturístico-gastronómico que necesitamos y también en el Patio Herreriano, que nos dé visibilidad y podamos crecer con un proyecto y propuesta muy interesante, vinculado a la V Atlántica del vino con el trabajo que estamos desarrollando con Burdeos y Logroño, además de Oporto. Incrementar la oferta de ese enoturismo incorporándonos a los grandes focos enológicos de Europa.  Esperamos, con Oporto, avanzar en un convenio de colaboración que permita que fluya ese turista interesado en la cultura del vino por las diferentes ciudades y capitales.

P.- Objetivo y deseo a corto y medio plazo

R.- Este tiene que ser un año de recuperación de la alegría de vivir.  Todo, a nuestro alrededor, cambia a una velocidad de vértigo. Nos encontramos con dificultades que no teníamos. Estábamos saliendo de una pandemia y entramos en temas muy complejos derivados de la ‘Guerra de Putin’. La inflación puede ser un problema, pero lo sabremos superar. Si tenemos alegría, alegría de vivir y contamos con la confianza de poder superar todas las dificultades como lo hemos hecho.  Encaro el futuro con optimismo realista. Hay que ser optimista porque la negatividad no vale para nada. Siendo realistas, estas van a ser unas ferias y fiestas estupendas. La gente puede recargar pilas, lo necesitamos. Viene un otoño complicado, pero con fuerza se superará.

 

 

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