El centro hospitalario Padre Benito Menni cumple medio siglo de vida en Valladolid, pero su historia se remonta a hace 140 años, cuando dos hermanas hospitalarias de Granada, Mª Josefa y Mª Angustias, decidieron luchar por las mujeres y su bienestar. Sacaron de la calle a aquellas que tenían alguna enfermedad y de las que nadie se quería ocupar. En aquel momento, solo se atendía a los hombres y gracias a la solidaridad de las monjas y a la ayuda del Padre Benito Menni pudieron ofrecerles una vida mejor.
La persona que hoy da nombre al centro hospitalario fue el encargado de crear este lugar mediante las donaciones que iban recaudando. Atendieron a las mujeres que padecían enfermedades mentales. Esto supuso todo un hito puesto que, además, les dio trabajo.
Hoy se cumplen 50 años desde que este centro está presente en Valladolid, dando atención a quienes más lo necesitan. Se fundó en 1972 con el objetivo de dar cobertura psiquiátrica a los enfermos de la capital. El gerente y director médico del Benito Menni de Valladolid, Ángel González, asegura que se sienten "muy felices y orgullosos" de esta celebración.
Este hospital, en 1975, fue el primero en atender a las personas de ambos sexos en la provincia de Valladolid. "Nosotros partimos de los valores hospitalarios que son los de la institución, todo nos lleva a ello. Nuestra misión es el paciente. Siempre digo que no voy a renunciar a la búsqueda de la excelencia en el cuidado de las personas y en el buen trato. Lo primero empieza por la dignidad del paciente. De ahí partimos con modernidades, como la unidad de robótica con la que contamos, pero lo más importante es la hospitalidad", asegura el doctor González.
Un espacio muy moderno, tras la reforma que se realizó hace 12 años, pero que sigue con los mismos valores arraigados de lo tradicional. El foco está puesto en la salud mental, uno de los principales motivos por los que comenzaron. Y es que no solo son un hospital, sino que también ayudan a las personas en su integración comunitaria: "Hemos hecho un desarrollo de salud mental comunitaria. Tenemos un centro de inserción sociolaboral en Valladolid donde formamos a las personas que tienen enfermedades mentales; les enseñamos una profesión, les damos prácticas en empresas y un trabajo. Además, tenemos pisos donde adquieren autonomía. Nos encargamos de tutelarlos y estamos pendientes de ellos", afirma el director del centro hospitalario Benito Menni.
Esta integración tiene una cobertura de dos años porque "nuestro trabajo es coger a la persona necesitada y ayudarla hasta que se integre en la sociedad". El daño cerebral es muy importante para los que forman parte de este centro, que llevan trabajando en ello desde 2003. La mitad de los pacientes son privados, pero la otra mitad son públicos ya que "cuando les dan el alta, aquí les ayudamos a recuperarse del todo".
En Valladolid cuentan 246 camas y más de 220 trabajadores. El director del centro hospitalario destaca que el 85% de la plantilla son mujeres: "En 2021 obtuvimos el distintivo de Castilla y León como reconocimiento a la igualdad en el ámbito laboral".
La celebración está muy próxima a fechas importantes como, por ejemplo, el Día de los Cuidados Paliativos o el Día la Salud Mental. Por ello, han elaborado un programa con el que darán cobertura a estos temas mediante intervenciones de especialistas, de familiares o a través de jornadas de divulgación.
Presencia en otros continentes
Este centro hospitalario tiene presencia en cuatro continentes, excepto en Oceanía. Hace unos años, decidieron comenzar con un proyecto, que recuerda a los orígenes. Abrieron en Kerala (India) un espacio en el que poder dar cobertura a todas aquellas mujeres que padecen alguna enfermedad mental o física y de las que nadie se hace cargo.
El doctor González confiesa que la superiora que había en Valladolid ha decidido marcharse allí a trabajar. Este espacio se pudo montar con la ayuda de las donaciones que le iban dando. En total hay 60 mujeres y 10 hermanas: "Con 3.000 euros comen durante todo el año, nosotros desde aquí enviamos los recursos que necesiten y, a través de donativos, les damos dinero para que puedan mantenerse todas allí".