El Ayuntamiento de Valladolid ha presentado un Plan Municipal de Salud, que estará vigente desde el 2022 hasta el 2024, con el objetivo de mejorar la salud de los ciudadanos e impulsar un modelo de ciudad saludable y sostenible. En él se contemplan diversas actuaciones destinadas a todos los colectivos que viven en la provincia: niños, adolescentes, personas mayores o personas con necesidades especiales.
Algunas de las actuaciones previstas son: reformar las medianas con un ancho adecuado para sillas de ruedas; instalar bancos para las personas mayores; reducir la proliferación de plagas de animales en los espacios urbanos; sensibilización de la población sobre la importancia de alimentación saludable; actividades lúdicas, deportivas y ocio alternativo; visitas a mercados municipales; fomentar el transporte sostenible; prevención del consumo de alcohol en los jóvenes e información sobre las enfermedades de transmisión sexual, entre otros.
El concejal de Salud Pública y Seguridad Ciudadana, Alberto Palomino, ha afirmado que esta es una “de las prioridades” de Valladolid. Para su elaboración, primero han realizado un diagnóstico sobre la situación, que les ha permitido focalizar el plan en aquellos puntos más importantes. En este se ha tenido en cuenta distintos ámbitos, utilizándose datos demográficos, socioeconómicos y de salud pública, enfocándose en los referidos a la morbilidad, mortalidad, discapacidad y asistenciales.
Por su parte, el concejal que preside la Mesa Intersectorial de la Estrategia de Promoción de Salud de Valladolid, Alberto Palomino, afirma que la obligación de los responsables políticos es "mejorar" el bienestar de las personas que viven en esta ciudad y de los que la visitan. Asimismo, este plan que se centra en cuatro líneas estratégicas, con 28 objetivos y 212 acciones ha tenido en cuenta “todos los factores que influyen en la salud”: biología humana, genética, sexo y edad, medioambiente, contaminación, entorno urbano, estilos de vida y asistencia sanitaria, entre otros.
Por otra parte, Palomino ha asegurado que del 100% del dinero que se destina a la salud, el 90% va a la asistencia sanitaria cuando “curiosamente esta solo es responsable del 10% y, por ende, es importante tener en cuenta el 90% restante que es determinante” para el bienestar de la población.
Las cuatro líneas en las que se está trabajando son: 1-Ciudad saludable y sostenible: un entorno en el que tener una vida saludable. 2-Entorno social y convivencia: herramientas para el bienestar psíquico. 3-Desarrollo económico y equidad: eliminar condicionantes que repercuten en la salud de las personas, sobre todo las más vulnerables. 4-Estilos de vida y promoción: herramientas para que las personas cuiden y mejoren su salud.
Un Plan de Salud que tildan de “fundamental” porque la salud “se debe tener en cuenta en todos los colectivos de la ciudad”. Y el principal objetivo es la salud de los ciudadanos” y un mejor estilo y la calidad de vida.