412.890 euros estafados a una empresa vallisoletana mediante el timo del Business E-Mail Compromise que han sido recuperados gracias a la rápida intervención de la Policía Nacional de Valladolid en una operación denominada como Kutake, y que sirve para alentar ante el aumento de este tipo de estafas en los últimos meses.

Todo comenzó a mediados del mes de julio cuando la Policía recibió una denuncia por parte del administrador de una empresa que había sido víctima de una estafa de gran cuantía. En concreto, 412.890 euros. La empresa vallisoletana perjudicada disponía de una asesoría externa que le aconsejaba en temas financieros e inversiones, recibiendo un email, supuestamente procedente de dicha asesoría, en similares términos a otros anteriores en el que se daban instrucciones para que la empresa realizara una inversión financiera para lo que tenía que realizar dos transferencias bancarias por importes de 201.410 y 211.480 euros, respectivamente, a la cuenta facilitada por los estafadores.

Una vez realizadas las transferencias, por un importe total de 412.890 euros, el representante legal de la empresa se puso en contacto telefónico con la asesoría para corroborar que se habían recibido correctamente dichas transferencias. En ese momento la asesoría comunicó que ellos no habían enviado ningún correo electrónico ni la cuenta destinataria del dinero les pertenecía, por lo que conocieron que habían sido víctimas de una estafa.

Inmediatamente el representante legal de la empresa vallisoletana interpuso denuncia, pudiendo comprobar el Grupo de Investigación Tecnológica que se trataba de una estafa conocida como Business E-Mail Compromise (BEC) o Man in The Middle

Tras realizar diversas gestiones de investigación, los policías pudieron comprobar que la cuenta abierta por los cibercriminales era de una entidad bancaria estadounidense donde efectivamente se habían transferido los 412.890 euros.

Rápida actuación

La rápida intervención policial hizo que a los estafadores no les hubiera dado tiempo a disponer de dicha cantidad, por lo que se procedió inmediatamente a su bloqueo preventivo. Posteriormente y tras recabar la preceptiva orden judicial, se procedió a la retrocesión de las dos transferencias a la empresa vallisoletana víctima de la estafa que finalmente no sufrió perjuicio económico alguno.

Desde la Policía Nacional de Valladolid, se ha iniciado una investigación con el fin de identificar plenamente a los cibercriminales así como al titular de la cuenta receptora de las transferencias fraudulentas, para lo que el Grupo de Investigación Tecnológica ha contactado a través de la Oficina Central Nacional de Interpol con el FBI.