Las elecciones municipales están cada vez más cerca. El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, asegura que la situación política del Ayuntamiento es "buena", que hay un "equipo de gobierno que tiene claro el rumbo" y confirma que después de ocho años de mandato, tienen una "política reconocible por la ciudadanía".
En relación con el resto de partidos confiesa que "no es malo que estén tan mal" porque así les permite "trabajar con la tranquilidad que tenemos en este momento" y que no se va a meter "en la casa de los demás". Sin embargo, sí que ha sacado un aspecto más crítico porque cree que la "ciudad es una cosa importante y el Ayuntamiento es serio" y que hay "algunos que no se lo toman en serio".
Lo cierto es que, esta misma semana, ya mostraba seguridad cuando desde PP y Vox se congratulaban por ser el "último pleno de presupuestos de Óscar Puente". A estas declaraciones se sumaba Conrado Íscar, que el jueves apuntaba que lo único que le "disgusta" es que "Puente siga siendo el alcalde".
Pese a las críticas que ha recibido durante los últimos días, él se muestra firme y garantiza que el actual equipo de Gobierno llega a la recta final del segundo mandato con una "forma impresionante". Además, ha mandado un mensaje de tranquilidad a la población: "Todo el mundo puede estar tranquilo sabiendo que al frente del Ayuntamiento hay un gobierno con las cosas claras".
La situación con Inobat "va bien"
La implantación de Inobat en Valladolid sigue sin estar garantizada. Pese a las grandes dudas que hay entorno a si, finalmente, estarán o no en la ciudad del Pisuerga, el alcalde afirmado que "están contentos", según la información que le han trasladado desde el Ministerio, con quienes se reunieron el pasado jueves por la tarde.
La próxima semana "los voy a volver a ver" y confirma que "están trabajando" y que, por ahora, todo va como debería. Como ya anunció hace unos días, Puente está planeando un viaje a Bratislava en Navidad con la ministra Reyes Maroto para conocer la fábrica.