Laguna de Duero es un municipio de la provincia de Valladolid que cuenta en la actualidad con 22.642 habitantes. Ha visto como su población ha crecido desde el año 2010, en el que registraba 22.110 habitantes, según los datos del Instituto Nacional de Estadística estudiados por EL ESPAÑOL de Castilla y León.
Su cercanía con la capital vallisoletana, está a escasos cinco minutos en coche, y su oferta de viviendas, algunas nuevas, hacen que sean un objeto preciado para los okupas, que “preocupan”, como confiesa en declaraciones de a este periódico el alcalde del municipio, Román Rodríguez de Castro.
El año pasado, otro municipio cercano a la capital vallisoletana, como es La Cistérniga, vivía una auténtica pesadilla con los okupas que entraban en una vivienda ubicada en la Avenida de Soria, número 13, de la localidad. Francisca y Santiago, los propietarios de esta vivienda, vivían días para borrar, hasta que llegó la orden judicial, después de 20 días, que obligaba a estos amigos de lo ajeno a abandonar la vivienda a mediados de febrero, concretamente el día 26 de ese mes. Ahora, los vecinos de Laguna sufren esta lacra que coge cada vez más relevancia en nuestra sociedad.
Un escrito
“Los hechos se remontan al mes de agosto, en un bloque de pisos que se ubica en la calle Maldonado número 12. La comunidad de vecinos aseguraba que estas personas, que estaban ocupando el piso, hacían mucho ruido y tiraban la basura al patio de luces”, nos cuenta el alcalde de Laguna de Duero, Román Rodríguez.
Los vecinos “enviaron un escrito” al Ayuntamiento de la localidad vallisoletana para que estuviera al tanto de los hechos por aquel entonces y, como confirma el primer edil, “presentaron denuncia ante la Policía Local y la Guardia Civil”.
El regidor de Laguna de Duero confiesa, en palabras a este periódico, que “existe preocupación” por los okupas ya que además del hecho en sí, de comenzar a vivir en una casa que no es suya, “causan problemas vecinales” que “afectan a la buena convivencia” en el municipio vallisoletano.
“Problemas de vecindad”
“Nosotros hemos intervenido porque ha habido molestias desde el verano, desde el mes de agosto, y eso genera un problema de vecindad. Son una pareja y una niña los que están dentro de este primer piso de la calle Maldonado número 12”, confirma la Policía Municipal en declaraciones a este periódico.
Tanto Guardia Civil como Policía Local aseguran que no serían las mismas personas que okuparon la vivienda de La Cistérniga y añaden que no han recibido, desde el juzgado, ninguna orden para que estas personas salgan de la vivienda.
Pesadilla, también en Laguna de Duero, con los okupas.