Este lunes, 16 de octubre, EL ESPAÑOL de Castilla y León, les contaba que Hispania Nostra incluía, el pasado miércoles 11 de octubre, al conocido Monasterio de las Claras de San Bernardino de Siena, que se ubica en la localidad pucelana de Cuenca de Campos, dentro de su lista roja.
Este periódico hablaba con el alcalde del pueblo vallisoletano que aseguraba que “no hay dinero” para abordar nuevas intervenciones en el lugar, tras las actuaciones que se llevaron a cabo los años 2018 y 2020 con las ayudas de la Junta de Castilla y León.
“El deterioro es importante en el lugar. El Monasterio de las Claras de San Bernardino de Siena iba a desaparecer”, afirmaba en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León el alcalde de la localidad, Juan José Bobillo.
Sin embargo, hay una asociación que se niega a que esta joya caiga en el olvido. La Fundación Rehabitar ha anunciado un crowfunding “próximamente” en su intensa lucha por conservar y recuperar el Convento de las Claras de San Bernardino de Siena.
El presidente de la Fundación, José Luis Sáinz Guerra, ha calificado esta incorporación a la famosa Lista Roja como una “buena noticia y un paso previo, para próximamente iniciar una campaña de micromecenazgo a través de la plataforma que ofrece la asociación Hispania Nostra con el fin de recaudar fondos para una primera intervención urgente”, y que ya cuenta con numerosos casos de éxito en Castilla y León.
La ruina de este convento del siglo XV fue la que motivó la creación de la Fundación Rehabitar en el año 2018, con el convencimiento de que es posible evitar su deterioro, conservarlo y utilizarlo como “un documento que narre la historia de esta tierra a las futuras generaciones”.
Poner en valor el patrimonio de la tierra para dinamizar la Comarca
El convento de las Claras de San Bernardino de Siena es un monumento “único en su género” donde el adobe y el tapial tienen un gran protagonismo en su arquitectura, muy acorde a las construcciones típicas de la comarca de Tierra de Campos donde se integra.
“Nuestra intención es hacer en este convento un centro de interpretación de la arquitectura en tierra, para poner en valor al barro como material de construcción del pasado, pero que también puede ser del futuro”, explica el presidente de la fundación.
La recuperación del convento y convertirlo en una base de apoyo para la revitalización de la comarca es el objetivo final para la Fundación Rehabitar, formada por un grupo de personas “comprometidas con el patrimonio cultural de Tierra de Campos” y cuya iniciativa para su protección, señalan, “es lo que ha motivado los diversos trabajos de consolidación y restauración en las cubiertas de la iglesia”.
Precisamente la iglesia, incluidas las dependencias conventuales como el coro, y los terrenos anexos, cercados y situados al norte, son actualmente propiedad de la Fundación Rehabitar.