EL ESPAÑOL de Castilla y León les informaba, este martes 21 de noviembre, de la desaparición de Rubén Rubio Álvarez, un joven de solo 18 años, de 1,84 metros, con gafas graduadas, pelo negro y vestido con un pantalón de chándal negro, chaqueta deportiva con cremallera, mochila gris y zapatillas New Balance negras y gris.

Todo después de que su familia denunciara la desaparición del joven en la tarde de ayer, en la comisaría de la Policía Nacional de la calle Gerona, en el barrio de Las Delicias de la ciudad del Pisuerga.

Este periódico ha conseguido hablar con el padre de Rubén, con Miguel Ángel, que entre lágrimas ha contado la historia de la desaparición de su hijo y le pide que vuelva a casa, para que esta pesadilla quede en un susto.

“Nos damos cuenta a eso de las 14.45 horas del martes, cuando Rubén no regresa a casa. Vivimos en La Cistérniga. El coge el autobús todos los días a las 7.25 para ir a clase, al Instituto La Merced de Valladolid. Suele bajarse antes de las 8.00 pero esta vez no bajó allí. Se está investigando donde lo hizo”, asegura el padre en declaraciones a este medio.

Sumamente abatido, Miguel Ángel añade que “solo le pedimos que vuelva”. “No sé, no podemos pensar que haya hecho esto por iniciativa propia”, afirma y pide ayuda a la ciudadanía para conseguir dar con el paradero de su hijo. Se han puesto a disposición de todo el que sepa algo, aunque sea un mínimo detalle, los números de teléfono 649 952 957 y 617 126 909. Además del mail de SOS Desaparecidos  info@sosdesaparecidos.es.

La Policía Nacional y la Guardia Civil están investigando el caso y el padre ha asegurado que aún, en la mañana de este miércoles, 22 de noviembre, Rubén no había aparecido.