La llamada de un vecino a la Guardia Civil de Valladolid alertando de la entrada por la fuerza de unas personas en una vivienda de la calle Prado número 2, en Laguna de Duero, ha permitido, junto a la Policía Municipal, frenar el intento de okupación.
Así lo han comunicado fuentes municipales a los medios de comunicación. Han explicando que en la operación han participado agentes de la Guardia Civil y Policía Municipal de Laguna de Duero, que en ese momento se encontraban en una invervención conjunta en el Camino de la Cistérniga junto con los efectivos de la Benemérita en el momento de la llamada, dirigiéndose todos ellos al lugar de los hechos.
Tras llegar al domicilio, encontraron en el interior a una mujer que decía llevar viviendo en el lugar un mes y que la vivienda se la había alquilado una persona. No obstante, los vecinos advirtieron de la falsedad de su testimonio.
La propiedad pertenece a la Junta de Castilla y León y la persona que habitaba la misma había muerto recientemente, un hecho aprovechado por los okupas para entrar. Habían entrado un total de cuatro personas, una de ellas un menor de edad.
Al no poder demostrar que llevaban días viviendo en el domicilio, acabaron procediendo a abandonar la casa de forma voluntaria a la espera de las diligencias judiciales.