Lucas Burgueño, el joven acosador del que es en la actualidad ministro de Transportes y Movilidad Sostenible en el Gobierno de España, ya ha salido de la cárcel, como han informado a EL ESPAÑOL de Castilla y León fuentes penitenciarias. Lo ha hecho este martes, 16 de enero.

Las mismas fuentes añaden que se encontraba en el módulo de respeto y que allí ha pasado más de dos meses por quebrantar esa orden de alejamiento con respecto a sus padres. Además, han añadido que el trato con el resto de reclusos internos en dicho módulo ha sido correcto. 

Han sido dos meses los que Burgueño ha estado en prisión preventiva en la cárcel de Villanubla después de que la magistrada del Juzgado de Instrucción Número 3 de Valladolid decretara, el pasado 7 de noviembre de 2023, su ingreso en prisión preventiva en la cárcel de Villanubla.

Ese día, el Juzgado de Instrucción Número 3 de Valladolid decretaba su ingreso en prisión “provisional, comunicada y sin fianza”, todo después de que quebrantara, presuntamente, una orden de alejamiento dictada con respecto a sus padres. Después de que exigiera a su madre 80.000 euros, por no publicar un vídeo de su madre. Por ello se enfrenta a un delito de extorsión.

Ahora, el coach y psicólogo esperará, desde la calle, tras más de dos meses encerrado en la cárcel de Villanubla, y en libertad, los diferentes procedimientos de las causas que tiene abiertas. 

La polémica con Óscar Puente

Burgueño saltaba a la fama el pasado 29 de septiembre. Todo, después de que por las redes sociales corriera un vídeo tras protagonizar un altercado en el interior del AVE que une Valladolid con Madrid con el diputado nacional del PSOE, Óscar Puente.

El joven acosaba al exalcalde de Valladolid sobre las 8.45 horas de esa mañana y obligaba a retrasar la salida del convoy durante 45 minutos. Las reacciones no se hacían esperar y Puente denunciaba los hechos.

A partir de ahí la polémica alrededor de este hombre, con las reacciones de los diversos partidos, se adueñaban de todas las redes sociales, en una semana en la que el exalcalde de Valladolid protagonizaba portadas tras ser el encargado de dar la réplica, por parte del PSOE, en la investidura fallida de Alberto Núñez Feijóo.

Detenciones

El hecho de que Lucas Burgueño haya pasado por prisión preventiva durante dos meses se debe a un total de cuatro detenciones que han estado muy presentes en todos los medios de comunicación, también en EL ESPAÑOL de Castilla y León.

Antes de estas tres se produjo, el pasado 10 de septiembre, otra detención después de amenazar gravemente, y de muerte, a dos policías vestidos de paisanos en la zona ‘Coca’, un lugar de marcha de la ciudad del Pisuerga. De hecho, una vez en dependencias policiales, Burgueño volvió a amenazar a los agentes.

La primera de las detenciones, a lo largo de estos 39 días, se produjo el pasado 10 de abril. En unos hechos que tuvieron lugar en la madrugada de ese día cuando Burgueño entró por la fuerza en la habitación del piso de su pareja del barrio de La Victoria de Valladolid. Fue la segunda en su historial, primera en este lapso de tiempo.

Por este altercardo, el Juzgado de Instrucción Número 5 de Valladolid decretaría la libertad con cargos de Burgueño que negó lo ocurrido.

La segunda de las detenciones se produciría después de que este periódico les contara que Lucas Burgueño protagonizó un ‘simpa’ en una conocida sidrería del centro de la ciudad, en Los Guajes, como informaban fuentes del propio establecimiento hostelero en declaraciones a este medio.

Sin embargo, la Policía Nacional detendría al bombero por amenazas y daños a sus padres. Sería el pasado 29 de octubre, cuando Burgueño sería detenido. El Juzgado de Instrucción Número 1 de Valladolid, en funciones, acordaba la libertad de Burgueño que se acogía a su derecho a no declarar. Quedaba investigado en una causa abierta por revelación de secretos, delito contra la intimidad, daños y extorsión.

Además, el juzgado imponía una orden de alejamiento de 300 metros y comunicación con respecto a sus padres, tras ser detenido. Una orden de alejamiento que quebrantaba este lunes, 6 de noviembre, lo que ha supuesto su ingreso en prisión.

La gota que colmó el vaso

La tercera detención por este quebrantamiento de la orden de alejamiento con respecto a sus padres es lo que ha supuesto que el psicólogo haya pasado dos meses en la prisión de Villanubla.

Ahora, Burgueño, esperará el proceso judicial de las diversas causas abiertas contra él en la calle.